«Yo enseñé a Pedro Duque cómo va la estación meteorológica de mi colegio»
![Sara Carreira Piñeiro](https://img.lavdg.com/sc/CCGQskIuYD2Sx7PcszNgvMVQ15g=/75x75/perfiles/76/1622629070450_thumb.jpg)
GALICIA
Dieciocho centros participaron en la primera feria de ciencias de la Xunta
06 jun 2018 . Actualizado a las 15:20 h.Un auditorio abarrotado y la canción Viva la vida (Coldplay) a todo volumen. Mil niños y niñas aplauden a rabiar: acaba de entrar Pedro Duque, vitoreado como una estrella de rock. El astronauta era el encargado de inaugurar STEMLab Galicia, la primera feria escolar de ciencias que se organiza desde la Consellería de Educación, una muestra con pocos centros todavía -18 de los 1.100 públicos que hay en Galicia: nueve IES, cinco CEIP, tres CPI y había un CIFP-, pero tan vistosa como seria.
Antes de visitar la feria, Pedro Duque fue comentando un vídeo de su viaje a la estación espacial internacional y les explicaba cómo han cambiado las cosas en España: «Cuando yo tenía vuestra edad y decía que quería ser astronauta me daban una colleja y me decían: “¡Cómo vas a ser astronauta tú, que eres español!”». Pero todo es posible, aunque habló del «problema genérico de incoherencia» de España, que quiere parecerse a unos países, pero que «invierte en I+D+i» como otros muy distintos. Apuntó que la inversión pública en ciencia debe triplicarse porque hay «muchos retos por delante», ya que hasta ahora solo «se ha rascado la superficie de la ciencia». En la misma línea se expresó Alberto Núñez Feijoo, quien destacó la equidad de Galicia, donde recibe la misma enseñanza un niño «do centro de Vigo que outro da Fonsagrada ou Nogueira de Ramuín», y que cuenta con profesores comprometidos: «Máis de 5.000 profesores van [en este curso] a clase de tecnoloxía e 2.000 estudan robótica».
Duque y Feijoo, acompañados por Román Rodríguez, conselleiro de Educación, y la plana mayor de su departamento, recorrieron los estands, parándose en todos los puestos, donde alumnos y profesores solo tenían ojos para el astronauta, la verdadera estrella de la mañana. En su periplo pudieron comprobar algunas de las cosas que se hacen en las aulas gallegas.
Robótica
Camino al éxito. Prácticamente en todos los estands había algún rover, sencillísimos vehículos que se mueven con las órdenes dadas desde el ordenador o el móvil. La Consellería de Educación ha dotado de robots a todos los centros públicos y está formando a los profesores para que pueden sacarles partido. Un robot del CPI Xunqueira (Fene) recorría todo un sistema circulatorio humano y en el IES de Ortigueira había uno submarino. Por haber, había hasta un hospital de robots, el del CIFP Ferrolterra.
Espacio
Hasta Marte y más allá. Es un asunto recurrente para los estudiantes, por divertido y multidisciplinar. En el IES A Xunqueira II (Pontevedra) los alumnos fantasearon con una misión a Marte (la comida fue su gran preocupación) y los del CEIP Laredo llevan todo el año trabajando con su Proxecto Laica, que incluye, por ejemplo, el entrenamiento para ser astronauta, un asunto muy serio que Pedro Duque considera uno de los retos del futuro: cómo salir de la nave en Marte después de seis meses en ingravidez sin ninguna ayuda exterior.
Impresoras 3d
Llenar la vida de color. Otra iniciativa de la consellería ha sido dotar de impresoras 3D a todos los institutos y centros públicos con secundaria, como los CPI. Por eso en casi cada estand había una, funcionando sin tregua, para hacer cosas de lo más variado, como el aparato para medir la velocidad del caudal de un río que hicieron los alumnos del IES Daviña Rey (Monforte). Y como los alumnos eligen los colores, las piezas forman un pantone que adoraría Ruiz de la Prada.
Realidad virtual
Nubes en las gafas. No está tan extendido su uso como el de la robótica, pero la realidad virtual se va haciendo un hueco, como el que ocuparon los de quinto del CEIP Ponte dos Brozos, que causaron sensación con sus gafas VR y sus paisajes.
Biología
Células para tocar. La biología y la tecnología van de la mano en el siglo XXI, y así se pudo ver este viernes. ¿Un ejemplo? Las células en 3D de los estudiantes del IES Urbano Lugrís de Malpica, que también ofrecían microscopios para los que prefieren el sistema «antiguo».
El viento, al minuto. En cada estand, en cada colegio, había varios proyectos expuestos. Como en el del CEIP Noalla (Sanxenxo), con una estación meteorológica controlada por ordenador al minuto. Allí un grupo de alumnas se encargaban de iluminar al visitante, incluso aunque fuese astronauta: «Pedro Duque me preguntó y yo le expliqué cómo funciona la estación meteorológica del colegio», comentaba, todavía incrédula, una alumna de sexto, la misma que después reconocía que el curso pasado, cuando comenzó con esto de la meteorología, no le gustaba demasiado: «Pero ahora sí me parece muy interesante».
Más que ciencia
Feminismo. Espectacular la presencia de niñas, demostrando que el desinterés es sobre todo falta de oportunidades. Ya lo decía Pedro Duque: «No se le puede decir a una niña que no es capaz de hacer algo [...]: hay que educar sobre todo a los padres».
Concurso. En un lugar destacado estaba Hamsternauta (Hana), una iniciativa de varias emergentes tecnológicas gallegas para hacer de la ciencia algo divertido para los niños. Ahora están con un plan piloto, y se trata de que los alumnos de un centro monten un robot y lo manden con una sonda al espacio para que vuelva después a tierra; dentro lleva un tamagotchi, un hámster virtual, que tiene que volver «vivo».
En directo. En la web del CEIP Laredo había una cámara en directo de su estand.
Espacio Maker. Entre las dos zonas de la feria, varias empresas ofrecían un espacio maker, para hacer, algo en lo que son expertos los alumnos del IES de Meaño.
Magia. La magia tiene mucho de ciencia, y al revés (si no se sabe la explicación), y Kiko Pastur se encargaba de demostrarlo.
Reponer fuerzas. La ciencia llega hasta la cocina. Por eso, el IES Fraga do Eume (Pontedeume) ofrecía tentempiés muy científicos y originales.
Formación. La feria acaba hoy con una jornada de formación de profesores con 600 inscritos.