Los profesores reclaman unificar calendarios aunque exija una adaptación
07 abr 2021 . Actualizado a las 16:02 h.Los directores de institutos gallegos (que forman Addiga) quieren que los criterios de eficacia que van a regir para segundo de bachillerato se extiendan también a primero y a la ESO. Es decir, que los exámenes de septiembre se celebren antes del verano para que los alumnos y sus familias puedan tener vacaciones y el centro se organice sin los cambios de última hora. Así lo manifestaron en el 18.º Congreso de la Federación de Asociaciones de Directivos de Centros Educativos Públicos (Fedadi), que se reunió este fin de semana en Reinosa (Cantabria).
Galicia tuvo una representación encabezada por Marisol Louro, directora del IES de Ames y secretaria de Addiga. Según explicó, la agrupación gallega apuesta por un calendario escolar que convierta septiembre en junio. Este cambio permitiría «diseñar con tiempo el siguiente curso», sabiendo qué alumnado tiene en las diferentes materias y, por tanto, qué profesorado necesita. Así, lo ideal sería que las notas de fin de curso se diesen sobre el 22 de junio y el 30 ya estuviesen terminados los exámenes extraordinarios.
Entiende Louro que no es un paso fácil: «Vamos a necesitar un período de adaptación, porque hay que acostumbrar a los alumnos y a sus familias a la importancia del trabajo diario». Está claro, dice, que si solo hay una semana para preparar los exámenes extraordinarios es muy poco probable que un estudiante que tiene cinco o seis asignaturas pendientes pueda superar el curso. «Tampoco se trata de hacer que los alumnos repitan -recalca Louro-, porque en el 90 % de los casos no es bueno para ellos». Llegar a un equilibrio es complicado y requiere un esfuerzo por parte de todos.
Pero lo que parece inevitable es eliminar los exámenes de septiembre, al menos a medio y largo plazo. En España hay una variedad enorme, pero Cantabria, Comunidad Valenciana, Navarra y País Vasco ya lo hacen; y La Rioja, Canarias, Extremadura y Madrid lo limitan a bachillerato.
Curso para llegar a la dirección
Otro de los asuntos que abordaron fue el acceso a la dirección. En Cataluña se aprobó un curso obligatorio, tanto para primaria como para secundaria, de 240 horas (de las que 104 son presenciales y 136 no presenciales). Los que ya estén desempeñando la dirección de un centro también tendrán que hacerlo, aunque será de actualización y no de iniciación. Hasta ahora, en Cataluña el curso era de 90 horas, pero una vez que el interesado ya sabía que había sido elegido.
En Galicia lo que hay es un curso voluntario para nuevos directores y directores en activo, y desde Addiga se reconoce que «es muy necesario tener una formación específica». Louro explica: «En Galicia lo que tenemos son profesores que se dedican a la dirección».
Con todo, lo que han hecho los catalanes (que se debe al desarrollo de un decreto propio del año 2010) se repetirá pronto en toda España: en enero del 2019, cuando la Lomce lleve cinco años en vigor, el acceso a la dirección de un centro exigirá en cualquier caso una formación específica. La Consellería de Educación ya está preparando la gallega.
El tercer punto tratado en Fedadi ha sido sobre potenciar la FP como una salida formativa de prestigio.