La piedra que dejó parapléjico a un ciclista de Vigo fue puesta «a mala fe», según la policía
GALICIA
El responsable de la investigación señala en el juicio que el obstáculo se colocó para hacer daño
14 jun 2018 . Actualizado a las 13:00 h.En la tercera jornada del juicio por el accidente que dejó tetrapléjico a un ciclista de Vigo, el responsable de la Policía Local que dirigió la investigación manifestó que la piedra contra la que se estrelló fue colocada «a mala fe». Los agentes que realizaron el atestado comprobaron cómo la roca, de un peso muy considerable, fue movida de su emplazamiento original para situarla en medio de la pista que utilizan decenas de aficionados al descenso en bicicletas de montaña. «Creemos que la piedra fue colocada con el ánimo de provocar un daño. Estaba perfectamente colocada en la trayectoria de un ciclista», expresó el agente durante su declaración en la sala de vistas de la sede en Vigo de la Audiencia Provincial de Pontevedra.
A unos metros del camino observaron la huella reciente que había dejado la piedra antes de ser arrastrada. Apreciaron pequeñas marcas del roce producido por el arrastre. No había ningún indicio de que el obstáculo hubiese llegado hasta el punto de peligro de una forma casual o por la acción de algún animal silvestre. «Se necesitaba una fuerza extrema para desplazarla», dijo el policía. Según su criterio, solo era visible una vez practicado el salto, cuando ya resultaba imposible esquivarla. El agente estaba convencido de que la piedra no llegó hasta la pista forestal de una manera fortuita.
La zona estuvo precintada durante unos días y, al finalizar las actuaciones, consideraron que ya no era oportuno mantener las piedras en ese lugar, por lo que decidieron apartarlas para evitar males mayores. Fueron necesarias tres personas para poder retirarla.
«Nunca estuvo allí»
Ayer también declaró el presidente de un club ciclista, que confirmó ante el tribunal que «la piedra nunca estuvo ahí». Supo del accidente pocas horas después de producirse y acudió con más personas a pedir explicaciones a la sede de la comunidad de montes. Ayer recordaba que uno de los acusados le dijo: «Si se cayó, que se levante», y que cuando le explicaron la gravedad de la caída dijo que no habían trabajado en esa zona para evitar cualquier responsabilidad. Otro aficionado al ciclismo confirmó en la vista oral que el día del siniestro se estaban realizando trabajos forestales en la pista. Acudió a primera hora de la mañana y observó a operarios con ropa de trabajo y motosierras que no le dejaron bajar por la pista con su bicicleta.