La agresora dejó a la anciana, que está en silla de ruedas, en el jardín de la casa y con las maletas hechas
09 ago 2018 . Actualizado a las 05:00 h.Agentes de la Guardia Civil han detenido en el municipio lucense de Meira a una mujer de 58 años de edad, con numerosos antecedentes policiales, por agredir a su madre de 90.
Los hechos ocurrieron en la madrugada del martes, sobre las 00.40 horas, cuando se solicitó la presencia de las fuerzas y cuerpos de seguridad para intervenir en un domicilio del barrio de A Pena, en Meira.
Una vez en el lugar, los guardias observaron a una anciana en el jardín de una vivienda pidiendo ayuda. Les explicó que había tenido una fuerte discusión con su hija, que quería abandonar el domicilio y que, durante la rencilla, esta le asestó un empujón y se cayó al suelo. A consecuencia del golpe sufrió una pequeña lesión en el dedo meñique de su mano derecha, erosiones en codos, rodillas y tobillos, además de un traumatismo craneoencefálico. Además, la nonagenaria afirmó que su hija la dejó en el jardín de su casa, con las maletas hechas y las puertas cerradas. La agredida fue trasladada al PAC de Meira para practicarle un chequeo médico y allí decidieron llevarla al HULA, donde permanece ingresada.
Tras auxiliar a la anciana, los agentes, con intención de entrevistarse con la supuesta agresora, llamaron a la puerta, pero esta no contestaba. Entraron en la vivienda y se encontraron con ella, que los recibió a gritos. La mujer fue detenida por un delito de malos tratos habituales en el ámbito familiar y en la mañana de ayer pasó a disposición judicial, en Vilalba.
Según indicaron los vecinos, la mujer reside en A Pena desde hace medio año y su madre se encontraba pasando unos días con ella, pero no viven juntas. Indicaron que se trata de una mujer muy conflictiva y temen nuevas agresiones. «Ten problemas con tódolos veciños. Tira o lixo pola estrada, molla aos nenos cando pasan pola pista...», aseguraron.
La subdelegada del Gobierno en Lugo, Isabel Rodríguez, confirmó que la agresora tiene otras denuncias y pesan sobre ella más de cien diligencias, con antecedentes por amenazas, contra el patrimonio y delitos contra el honor e injurias. «Se trata de una persona conocida por las fuerzas de seguridad por líos con los vecinos. En esta ocasión fue más grave, con agresiones a su madre, que es una persona con dificultades de movilidad y que estaba en silla de ruedas», indicó la subdelegada, que añadió que no constan otras agresiones a la madre por parte de la detenida.