Ni Carolina Bescansa ni Antón Gómez Reino se lo van a poner fácil. La primera mantiene una estrecha relación con Carmen Santos mientras que el segundo fundó la Marea Atlántica con Ferreiro, que no figura entre los aliados de Villares
03 oct 2018 . Actualizado a las 21:40 h.Con tal desembarco de políticos de Podemos llegados de la capital, nos habíamos olvidado de En Marea. Y no deberíamos, porque gane Bescansa, gane Gómez-Reino o gane un tercero en discordia, tampoco está claro con quién le tocará negociar para llevar a buen puerto la marejadilla de En Marea. No olvidemos que si Podemos está en proceso de renovación de su cúpula, En Marea también. Y que, de momento, solo Luís Villares se puso a disposición de los inscritos para repetir al frente del partido instrumental. Pero a nadie se le escapa que, si no entra por el aro de los críticos, habrá listas alternativas para el consello das mareas.
Y a Villares, siempre conciliador hasta el punto de repetir que el rey va vestido cuando todos a su alrededor señalan su desnudez, le va a resultar muy difícil contentar a todos ahora que le crecen los primeras espadas. Como si no tuviese suficiente con el protagonismo de los tres alcaldes, con los exabruptos de Beiras o las salidas de tono de Yolanda Díaz, ahora van y amenazan con tener algo más que decir Carolina Bescansa y Antón Gómez-Reino. Sus apellidos con pedigrí galaico lo dicen todo.
Ninguno de los dos se lo va a poner fácil, aunque por diferentes motivos. Gómez-Reino fundó la Marea Atlántica junto con Xulio Ferreiro, y el alcalde de A Coruña no figura entre los aliados de Villares, más bien al contrario. Tone, por lo tanto, siempre estuvo cerca de ese sector crítico de En Marea que no se siente representando por la dirección que encabeza Villares. Carolina Bescansa, por su parte, no quiso desvelar ayer cómo ve ella el proceso de construcción de En Marea, pero mantiene una estrecha relación con Carmen Santos y la secretaria xeral en funciones de Podemos Galicia lleva meses peleando por conservar la marca de Podemos dentro de las mareas y evitar que se diluya la formación morada, recelosa siempre con el proceso, lo mismo que Eva Solla y sus compañeros de Esquerda Unida.
El 25 de octubre se sabrá quién es el nuevo líder de Podemos en Galicia, y solo dos días después será el plenario de En Marea que dará el pistoletazo de salida a la elaboración de candidaturas para renovar la dirección. Serán días de vértigo en los que puede pasar de todo, que la política ya nos tiene acostumbrados. Y más con tantas estrellas en el elenco.
