La tarifa plana sustituye ya a los peajes en las autopistas de nueve países de Europa

Carlos Punzón
carlos punzón VIGO / LA VOZ

GALICIA

La viñeta más cara es la de Hungría, cuyo coste anual es inferior al de nueve viajes por la AP-9 entre Vigo y A Coruña

13 oct 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

El ministro de Fomento, José Luis Ábalos, expresó en su viaje a Galicia su intención de abrir un debate sobre los excesivos beneficios que a su entender obtienen en España las concesionarias de autopistas, y a la vez solventar cómo se va a costear el mantenimiento de las vías de alta capacidad que en los próximos años quedarán libres de peajes. Nueve países de Europa han implantado ya el sistema de tarifa plana en sus autopistas y autovías, que se pueden recorrer sin límite de viajes a cambio de la adquisición de la llamada viñeta, cuyo precio es mucho más económico que los peajes que tienen que afrontar los conductores en Galicia. En casi todos los países donde es obligatoria su compra existe la posibilidad de adecuarla a la estancia o a los viajes: por días, semanas, meses o un año.

hungría

La más cara. Cuenta con la viñeta más cara de Europa, aunque por 10,78 euros se puede comprar la habilitada para diez días, sin límite de recorridos. Sube a 14,73 para un mes y a 132,45 la anual (en realidad cubre 13 meses). Aunque el coste es elevado, resulta inferior al gasto en peajes de nueve viajes por la AP-9 entre Vigo y A Coruña. El país magiar tiene además viñetas provinciales para los que no salgan de sus demarcaciones. Su precio anual es de solo 15,40 euros. Ser sorprendido sin la pegatina electrónica en el parabrisas del vehículo o llevarla caducada acarrean multas de entre 45,8 y 324 euros.

montenegro

La ecológica. El país balcánico ha adoptado la viñeta como un impuesto ecológico tras declararse como «Estado democrático, social y ecológico». Los residentes en Montenegro pagan la tasa cuando matriculan el vehículo, mientras que los extranjeros tienen que abonarla al entrar en el país, a un coste de 10 euros para transportes ligeros.

suiza

Vía de financiación. Suiza es uno de los países de Europa con la mayor red de autopistas en relación con su tamaño. La viñeta suiza es de las que más tradición tiene en el continente, y fue adoptada como vía de financiación del mantenimiento de la red. Su precio, dependiendo del valor de la moneda, ronda los 40 euros (ahora 35,04) y es válida entre el 1 de enero de un año y el 31 de enero del siguiente. Los coches con caravana deben de adquirir dos. Se vende en oficinas de correos, gasolineras, aparcamientos y oficinas cantonales de tráfico.

austria

Diversidad. Las viñetas austríacas se venden en las gasolineras de los países vecinos y es obligatorio contar con ella al cruzar la frontera. También los estancos del país la comercializan. O se puede adquirir por Internet, pero como máximo 18 días antes de utilizarla. Hay viñetas para autopistas y para autovías. Las controlan cámaras a lo largo del recorrido y los gestores de los viales. Su precio oscila entre 26,20 euros para dos meses y 87,30 para un año. ¡Ojo!, hay peajes clásicos también en algunas carreteras alpinas y túneles.

eslovenia

Altas multas. El precio de la tarifa plana eslovena varía en función de la altura de los ejes del vehículo. Para siete días cuesta 15 euros para un vehículo ligero tradicional, 30 para un mes y 110 la anual. Las multas por no portarla van de 300 a 800 euros.

rumanía

La más barata. Utilizar las autopistas rumanas cuesta en el equivalente a peajes solo 3 euros para siete días y sube a 7 para un mes. La viñeta anual tan solo vale 28 euros, ocho más que la tarifa de Audasa para transitar entre Ferrol y Tui. Eso sí, hay pasos, como puentes, que aún cuentan con peajes clásicos.

bulgaria

Casi todo con viñeta. Solo las circunvalaciones, enlaces y calles urbanas están exentas de portar la viñeta. Según el peso del vehículo, el coste de la viñeta es de 8 euros para estancias de siete días, de 15 para un mes y de 50 para todo el año. El puente sobre el río Danubio tiene su propio peaje. Si le sorprenden sin la viñeta, la multa es de 250 euros.

república checa

Para mejorar la red. El país moderniza su red viaria con las viñetas electrónicas, entre otras fuentes de financiación. Para viajes cortos la viñeta de diez días cuesta 11,47 euros, sube a 16,28 para un mes y a 55,51 la anual, cuya vigencia es de 14 meses.

eslovaquia

Desde el 2016. Ha sido uno de los últimos países en incorporar la tarifa plana mediante la viñeta electrónica. Independientemente de cuándo se compre, la tarifa anual vence el 31 de enero del año siguiente y su precio es de 50 euros. Para un mes cuesta 14 euros y uno al día para la modalidad de diez días, la tarifa plana recomendada para turistas.

Cataluña planea adoptar en el 2019 la viñeta y recaudar 1.000 millones al año

La Generalitat de Cataluña ya ha planteado al Ministerio de Fomento la eliminación de todas las barreras de pago físicas aprovechando el fin de la concesión de la autopista AP-7 el año que viene y de otras cuatro concesiones más en el 2021. Pero el Gobierno catalán no pretende que pasen a ser gratuitas una vez se desmonten los puestos de peaje. En un informe remitido al Gobierno central, el Ejecutivo autonómico señala su intención de implantar la tarifa plana mediante viñeta electrónica en todas las carreteras de alta capacidad, ya sea titular la Generalitat o la Administración central.

El estudio económico de tal medida señala que la recaudación que se obtendría se acercaría a los 1.000 millones de euros anuales, además de ahorrar otros 700 millones en peajes en sombra y en vías gratuitas. El Gobierno catalán tendría que tener, además del visto bueno de Fomento, pues parte de las infraestructuras son de su titularidad, la aprobación de las empresas que explotan las autopistas en la comunidad, pues podrían aducir el actual contrato como única exigencia legal en su concesión.

El departamento de Territorio y Sostenibilidad mantiene que la viñeta es el sistema que menos discriminaciones genera, pues no focaliza en determinados puntos el peso de los peajes, sino que todos los automovilistas que utilicen vías de alta capacidad pagarían la misma cantidad, independientemente de dónde se resida.

La Generalitat prevé un precio anual de la viñeta de entre 60 y 80 euros más IVA, importe que se les devolvería a los conductores que acrediten haber circulado con sus vehículos menos de 3.000 kilómetros al año y no haber sido detectados por los lectores de matrículas que controlarían la vigencia de las viñetas y su caducidad.

Audasa augura a su plantilla que su futuro lo decidirá un juez

El futuro de la AP-9 se dilucidará en los tribunales. La dirección de Audasa está tan persuadida de que será la Justicia la que resuelva sobre la venta de su grupo empresarial, que así se lo ha transmitido a los representantes de los trabajadores en una reunión celebrada el miércoles en su sede de A Coruña. Encabezada por el director general de Audasa, José César Canal, los responsables de la gestora de la autopista del Atlántico transmitieron al comité intercentros su convencimiento de que nada cambiará en la organización del trabajo en el vial gallego, ya sea el fondo de pensiones holandés APG asociado con la norteamericana Corsair Capital el que amplíe su participación hasta hacerse con la mayoría de las acciones, ya sea en cambio Globalvia la que consiga comprar el 55,6 % de la empresa.

Los representantes de Audasa describieron en el encuentro con el comité laboral los derechos que aduce cada ofertante y concluyeron que con toda probabilidad acabará siendo un tribunal el que decida si el derecho de tanteo que Corsair alega para neutralizar la oferta de Globalvia está bien argumentado o lo ha perdido al no hacer la oferta de compra más que a la constructora Sacyr, uno de los tres socios que habían firmado su disposición a vender. Abanca, que posee el 23,81 % de las acciones de Itínere, y Kutxabank, que cuenta con otro 16,3 %, ya habían pactado en julio su venta a Globalvia, como también Sacyr, que posee el 15,51 %, pero ha sido obligada cautelarmente a no vender mientras se sustancia la disputa. APG y Corsair han acudido al Tribun al de Arbitraje de Madrid y Globalvia a un tribunal de primera instancia para hacer valer sus ofertas.

Pese al laberinto jurídico, Globalvia, que pretende la gestión de las cuatro autopistas gallegas (ya tiene la AP-53, Santiago-Dozón), ha citado para el próximo día 17 en una notaría de Madrid a los tres accionistas españoles de Itínere para que firmen la venta de sus acciones. Fuentes de la operación señalan que tanto Abanca como Kutxabank mantienen su compromiso de venderle sus participaciones, mientras Sacyr se encuentra entre la espada y la pared por las dos órdenes cautelares dictadas para que no venda. El movimiento que traza Globalvia también trata de retratar a los tres accionistas que podrían darle la mayoría, pues todos ellos admitieron pagar una indemnización de 100 millones de euros si rompían el pacto de venta.