«Hay municipios con un niño, sus cuatro abuelos y sus ocho bisabuelos»

Francisco Balado Fontenla
fran balado MADRID / LA VOZ

GALICIA

La comisionada nació en Valencia, pero su familia es originaria de Galicia
La comisionada nació en Valencia, pero su familia es originaria de Galicia BENITO ORDOÑEZ

Isaura Leal es la comisionada para el reto demográfico: «Si hay una medida prioritaria de todas las necesarias, es garantizar una buena conectividad a Internet»

01 dic 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

«Yo soy de la casa de Chousa». Así se presenta Isaura Leal (1959), la comisionada contra el reto demográfico, que viene a ser como la máxima responsable de arreglar la desfeita poblacional que padece España, y muy especialmente Galicia. Nació en Valencia por accidente, pero por sus venas solo corre sangre gallega. Vivió en Lugo hasta que se marchó a Valladolid para estudiar Derecho. Pasa sus vacaciones en Foz y siempre que puede regresa a su casa familiar de Sarceda, en Castroverde, una aldea de cinco viviendas en la que residen solo dos personas. Una de ellas, un madrileño que acaba de comprar una casa por Internet para transformarla en un hotel rural, justo pegada a la de los Chousa. Parece que el problema le toca muy de cerca.

-Hace dos semanas recibió a los responsables demográficos de cada comunidad autónoma. Coinciden en que las sensaciones son muy buenas, pero desde Galicia lamentan la ausencia de medidas concretas. ¿Es por falta de tiempo [lleva en el cargo cinco meses], de dinero, o de ambos?

-El encargo de elaborar una estrategia nacional frente al reto demográfico es un acuerdo de todas las comunidades que le plantean a Rajoy la necesidad que tiene España de abordar los cambios demográficos que estamos sufriendo y que venimos arrastrando desde hace décadas: despoblación, envejecimiento y los efectos de la población flotante. En ese encargo han de participar el Gobierno central, los autonómicos y los representantes de las entidades locales. Es un tema que afecta a todo el país. El 53 % del territorio español está en riesgo de despoblación. Es un proyecto de país a corto, medio y largo plazo. Aquí no hay ni varitas mágicas ni recetas únicas.

-Además de las dos Españas ideológicas, ¿existen las dos Españas demográficas?

-La intensidad de los riesgos demográficos, incluso dentro de Galicia, no es la misma en unas zonas que en otras. Hay territorios donde todos los indicadores se colocan en rojo. Hay municipios en los que la ratio de población supera los 12 mayores de 65 años por un menor de 16. No está asegurado ni el relevo generacional.

«Hay que romper los estereotipos de fracasado de los que se han quedado en el pueblo»

-Se está negociando el reparto de fondos de la UE para el 2021-2027. La Xunta incide en la necesidad de tener en cuenta tres variables: envejecimiento, despoblación y dispersión. Está el caso de Islandia, poco poblada, pero con la grandísima mayoría de su población concentrada en el sur, por lo que resulta más barato prestar servicios que en otras zonas más pobladas pero con una mayor dispersión.

-Me voy a remitir a las palabras del presidente en el Senado. Este Gobierno es consciente de que hay que abordar el coste de la prestación de servicios en los territorios que se encuentran con estos riesgos demográficos. Estamos hablando de igualdad de oportunidades y de que los derechos sean efectivos para todas las personas, no importa el lugar en el que vivan. No solo en oportunidades, también en el ejercicio efectivo de derechos: salud, educación, dependencia, infraestructuras...

-¿Qué medidas se han impulsado desde que asumió el cargo?

-Ademas de diseñar el futuro, tenemos la obligación de gestionar el presente. Tenemos dos medidas en el BOE. Una convocatoria de las subvenciones correspondientes al fondo de Garantía Juvenil para crear empleo, autoempleo y emprendimiento de jóvenes de entre 16 y 30 años que viven en los municipios en riesgo de despoblación. Con una dotación de 80 millones de euros. Me dirán muchos: «No es suficiente». Pero era necesaria. La otra medida, la orden del Ministerio de Economía por la que insta a las operadoras a cumplir con su obligación de cubrir el servicio de banda ancha a 30 megas al menos al 90 % de los ciudadanos que viven en municipios de menos de 5.000 habitantes. Si hay una medida prioritaria de todas las necesarias, es garantizar una buena conectividad a Internet.

 «Con la estrategia nacional vamos a tratar no solo de mantener población, sino de atraerla»

-La estrategia nacional se presentará en la primavera del 2019.

-Estamos encontrando cooperación y colaboración en la Xunta y esperamos alcanzar un alto grado de consenso para sacarla adelante con el apoyo de las comunidades autónomas y con la representación de las entidades locales a través de la FEMP. Vamos a tratar no solo de mantener población, sino de atraerla.

-¿De verdad lo ve posible?

-¿Se imagina un país que renunciara a una buena parte de su territorio y recursos? Imagine el sobrecoste social que supondría. Tenemos un territorio lleno de oportunidades.

-El diagnóstico parece claro. ¿Y el tratamiento? ¿Qué opinión tiene del cheque bebé?

-El envejecimiento no varía por el hecho de que se incremente la natalidad. Lo que se hará esto es compensar la pirámide poblacional, que se está invirtiendo. Yo creo más en las políticas que favorezcan el apoyo y el acompañamiento a la crianza de los hijos; es decir, escuelas de 0 a 3 años, ayudas a los libros de texto, becas, las condiciones del mercado laboral, la estabilidad en el empleo, los permisos de paternidad y maternidad, las medidas de conciliación... Eso es lo que determina que usted se decida a tener hijos. Como país tenemos la necesidad de incrementar la natalidad. En muchos municipios hay un solo niño acompañado por sus cuatro abuelos y sus ocho bisabuelos. Es una ratio de doce mayores por un menor. Y lo que es peor, hay muchos municipios en los que están los abuelos y los bisabuelos, pero ya no hay niños.

-¿Necesitamos inmigrantes?

-Necesitamos generar las condiciones económicas de oportunidades y garantizar empleo y vida digna en todo el territorio. A partir de ahí, podremos hablar de las personas que tienen que vivir en ese territorio. Y España tendrá que abordar ese debate en el marco de la UE y desde una visión de oportunidad de una inmigración regularizada y legal.

«No he encontrado a un gallego sin morriña: eso debe ser un potencial»

Galicia reúne todos los ingredientes para ser catalogada como zona catastrófica: envejecimiento, emigración de los jóvenes y dispersión poblacional.

-Resulta inevitable ser pesimista.

-La resignación solo nos conduce al abandono. Y el victimismo, a que todos los que todavía permanecen se marchen. Yo no soy pesimista. Galicia es una tierra de enormes oportunidades. Lo que tendremos que encontrar es la manera de que se oriente a una mayor actividad económica y de creación de empleo. E insisto en una tercera derivada, que es la de la inteligencia y el talento incorporados al territorio. Y los gallegos y gallegas tenemos un nivel de formación muy importante. Sería muy interesante obtener resultados de un plan de retorno adecuado de los que se han ido para que vuelvan e incorporen, no solo lo que llevaban aprendido, sino el valor añadido de lo que han desarrollado y adquirido fuera, y que eso lo hagan en su tierra. Todavía no me he encontrado a ningún gallego que no tenga morriña. Y eso para nosotros se tienen que convertir en un potencial, porque cuando hablamos de establecer lazos de afecto con el territorio, los gallegos lo tenemos. Lo traemos de serie. Y fíjese, a lo largo de estos meses que nosotros aprendemos, vemos que es muy importante las alianzas entre las Administraciones públicas, partidos, empresa y banca, pero es importantísimo también el papel de los medios de comunicación y de los que generan cultura. En Galicia los medios están sensibilizados, y nuestros escritores, cineastas y guionistas también trasladan la realidad de nuestra tierra.

-Ya que asoma la literatura, recordará al protagonista de «El camino», Daniel el Mochuelo. Su padre, el quesero, le presionaba para que estudiara y pudiera «progresar» abandonando el pueblo cuanto antes, algo que él no tenía tan claro, porque le gustaba la vida rural. ¿Tenemos un problema cultural?

-Totalmente de acuerdo. A nosotros nos animaron a estudiar para irnos. Hay que romper con los estereotipos de las personas que se han quedado en el pueblo o que quieren volver, porque no son el fracasado, el que no tiene estudios, el que no vale para otra cosa... No se corresponde con la realidad. El indiano regresaba a Galicia, hacía un pedazo casoplón y plantaba una palmera.

-¿Se enteró de que Gwyneth Paltrow pidió una aldea de Lugo en su carta a los Reyes Magos?

-Sí, me envió la noticia un compañero, y le contesté: «¡Espero que no sea la mía!».