Cuatro recetas para la sanidad gallega

GALICIA

Sede del Servizo Galego de Saúde (Sergas) en Santiago de Compostela
Sede del Servizo Galego de Saúde (Sergas) en Santiago de Compostela SANDRA ALONSO

¿En qué podría Galicia gastar el dinero extra que Feijoo ha reclamado a Madrid?

15 mar 2019 . Actualizado a las 05:00 h.

La política de fachadas siempre es tentadora, pero la sanidad gallega necesita más que ladrillo. Los 300 millones extras que Feijoo ha pedido que Madrid le deje gastar pueden servir para cubrir carencias y hacer reformas.

envejecimiento

Sin conexión entre hospitales y residencias. A más edad, más enfermedades. El envejecimiento galopa en Galicia como un caballo desbocado. Hay más de 675.000 gallegos que superan los 65 años. El sistema sanitario lo nota: los mayores pueblan las consultas, compran más medicamentos y ocupan más camas. «Podemos dar a un enfermo un medicamento que nos cueste 300.000 euros, pero después no sabemos si alguien en su casa le va a dar de comer», dice un médico. Y ese es el problema: apenas existen puentes que conecten el sistema sanitario con el sistema sociosanitario. Hay una muy tenue relación entre los hospitales y las residencias de ancianos, entre los centros de salud y los cuidadores de dependientes. Con un envejecimiento galopante y con las enfermedades crónicas como gran reto, esa desconexión de lo sanitario y lo social provoca más estancias en los hospitales, más descompensaciones de enfermedades y más gasto en farmacia. Es hora de conectar esos mundos.

Atención primaria

Médicos y enfermeras. La propia Xunta reconoce que necesita más personal en atención primaria. Lo dice cuando anuncia una oferta pública de empleo extraordinaria, cuando reclama a Madrid que elimine la tasa de reposición y cuando pide al ministerio que haga un mir excepcional para atención primaria. Mientras el modelo de centros de salud se mantenga hacen falta médicos y pediatras. A medio plazo harán falta enfermeras, y ya toca empezar a planificarlo.

Farmacia

Sobrevivir. Es cierto que la contabilidad de la Xunta es estricta, pero también lo es que el Servizo Galego de Saúde es deficitario. En el 2017, por ejemplo, gastó 3.900 millones de los 3.534 que tenía presupuestados. La sanidad siempre va a más. Para el 2019 cuenta con 3.900... y habrá que ver dónde acaban. El gasto de los hospitales en fármacos crece a ritmos superiores al 10 % anual. La inmunoterapia y los nuevos tratamientos para el cáncer o la medicina personalizada convierten en calderilla los 300 millones extras que reclama Feijoo.

listas de espera

Una cuestión de credibilidad. La sanidad pública tiene un gran problema de credibilidad, que son las listas de espera. Provocan una fuga de usuarios a la privada. La clave no está en los 62 días que tarda una operación en Galicia, de media, sino en los 45 que se esperan para una consulta, en los 61 que se demora una prueba radiológica, etcétera. Cuando el paciente llega al quirófano lleva muchos meses de peregrinación. Hoy hay 40.000 gallegos más que hace cuatro años esperando una consulta en el hospital... que cierra por las tardes. Con dinero se puede reducir la lista de espera, lo cual soluciona problemas de personas y da confianza en el sistema.