La Fiscalía advierte que avisar de controles entorpece la lucha antiterrorista

José Manuel Pan
José Manuel Pan REDACCIÓN / LA VOZ

GALICIA

Imagen de archivo de un control de la Guardia Civil
Imagen de archivo de un control de la Guardia Civil ANGEL MANSO

Ordena a la Guardia Civil de Tráfico que investigue las «apps» que alertan de la ubicación de las patrullas

12 abr 2019 . Actualizado a las 22:02 h.

«Cuando el aviso de un lugar de control recae en una persona que conduce bajo la influencia del alcohol y se consigue que lo eluda, se consigue asimismo mantener una situación de elevado riesgo para él y para los demás usuarios de la carretera». Esta es una de las advertencias que hace el fiscal coordinador de Seguridad Vial de la Fiscalía General del Estado, Bartolomé Vargas, en el oficio que ha enviado a la Guardia Civil y a las demás policías judiciales de Tráfico, incluidas las policías locales, para que investiguen las aplicaciones de móvil y demás herramientas tecnológicas que avisan de la ubicación de los controles de tráfico en sus respectivas zonas. Pero no es el único riesgo que observa el fiscal, ya que dice que al crearse últimamente avisos de presencia policial, sin más comprobación del motivo, puede frustrarse «la investigación o persecución de otras formas delictivas de mayor gravedad, como el tráfico de drogas o actividades terroristas».

El fiscal de Seguridad Vial ordena a los agentes encargados de la vigilancia del tráfico que «tras las oportunas comprobaciones», le informen sobre «cuáles son las apps y herramientas tecnológicas que realizan estas conductas en su territorio, su modus operandi, los daños o perturbaciones que se ocasionan a los controles y las fuentes de las que se obtiene la información».

El oficio remitido por el fiscal no se queda solo en la reclamación de información sobre esas aplicaciones a las policías encargadas de la gestión del tráfico, sino que advierte que una vez recibidos los datos, y en función de su contenido, decidirá «las iniciativas, propuestas o ejercicio de acciones que sean procedentes». Vargas es muy duro con ese tipo de avisos, ya que sostiene que «la trascendencia de los controles es incompatible con las conductas que se vienen observando en los últimos tiempos de avisar, en particular a través de apps de uso compartido u otras herramientas tecnológicas, de los lugares en los que se está realizando un control de alcohol o drogas».

«Tras el aviso dan rienda suelta a la velocidad»

En el caso de los radares, la ley permite los mecanismos que informan de la posición de los sistemas de vigilancia y la propia DGT identifica en su web la ubicación de los controles fijos de velocidad, pero el fiscal señala que cuando se trata de radares deliberadamente camuflados u ocultos por la autoridad competente», los avisos «obstaculizan» la vigilancia. Vargas añade que «no debe impulsarse la cultura de que pasado el radar se pueden infringir los límites legales de velocidad, y hay un porcentaje de conductores que tras el aviso en las apps van ya preparados para dar rienda suelta a la velocidad que estiman conveniente».

«Obstaculización grave»

Pero la Fiscalía se centra en especial en los avisos de controles de alcohol o drogas, porque suponen «una obstaculización grave» a la vigilancia, «se frustran sus finalidades preventivas y se ocasiona una perturbación grave a las estrategias para atajar la siniestralidad». Explica que los avisos obligan a la Guardia Civil y al resto de las policías a establecer controles itinerantes y de corta duración, como se están realizando en Galicia, «con lo que los esfuerzos de los agentes pierden eficacia y, sobre todo, se ocasiona un daño considerable a la seguridad vial».

Los avisos de la ubicación de los controles policiales han puesto en alerta a la propia DGT tras las peticiones planteadas por la Guardia Civil de Tráfico y por el resto de policías, tanto autonómicas como locales. El organismo encargado de la gestión del tráfico ha pedido un informe a la Abogacía del Estado para estudiar la ilegalización de ese tipo de avisos ante los daños que causa a la vigilancia del tráfico.