
El plan para mejorar la sanidad gallega supera los cien millones en tres años, buena parte dirigidos a equipamiento y reformas. Las demandas de los profesionales van más allá
29 may 2019 . Actualizado a las 18:50 h.No puede decirse que el Sergas no haya buscado el acuerdo con los sanitarios. Decenas de reuniones lo confirman. Que lo haya logrado es otra cosa. Tras presentar un primer borrador del plan de atención primaria para mejorar este nivel asistencial, con 175 medidas y recibido con luces y sombras, Feijoo anunció esta semana el documento definitivo, 200 actuaciones, 102 millones y creación de 331 nuevas plazas.
¿Son los 102 millones una respuesta al conflicto de la primaria?
En su mayoría no. Explicaba con acierto un médico de familia en este periódico, en una primera valoración del plan, que cuatro quintas partes del presupuesto se dirigen a equipamiento, mobiliario y dotaciones informáticas. Es preciso actualizar los recursos físicos, sí, sobre todo de material, pero no es este el problema principal de la primaria. Además, dentro de este montante se cuelan infraestructuras previstas que nada tienen que ver con el conflicto que desde hace meses, quizás años, vive este modelo. Otras cantidades que no se enmarcan en el nuevo modelo de primaria son por ejemplo los 5,6 millones de incremento de la adquisición de vacunas para la gripe y el papiloma humano, una política sanitaria loable pero que va más allá de la reforma de la primaria. Las nuevas plazas para médicos de familia, el refuerzo del mir, el incremento de enfermeros especialistas en medicina familiar o el nuevo contrato de continuidad para que los facultativos de familia que realizan sustituciones tengan mayor estabilidad sí están orientados a reducir y mejorar la sobrecarga asistencial de determinados centros de salud, uno de los motivos por los que explotó este conflicto.
¿Ha logrado el plan poner fin a las protestas?
De momento, no. Y la semana que viene es un claro ejemplo. Los médicos de familia de Vigo han convocado una huelga por no estar de acuerdo con las negociaciones del Sergas los días 21 y 22 de mayo. Las nuevas asambleas de áreas sanitarias apoyan este paro y proponen otro en junio, y después están los puntos de atención continuada, en conflicto desde finales del pasado verano.
¿Se han tomado medidas para mejorar la primaria?
Primero, el problema no es exclusivo de Galicia, y la comunidad no tiene todas las herramientas para solventarlo. Por ejemplo, la consellería está atada en política de formación de profesionales sanitarios, por lo que debe pedir al ministerio que autorice más plazas mir. Segundo, sí recoge el plan actuaciones que tendrán un impacto positivo en los pacientes. Una de las más evidentes es que todos los médicos de familia de Galicia tengan acceso a la petición de pruebas complementarias. Otra, que los jefes de servicio accedan a indicadores de gestión ?una medida que ya entró en vigor a principios de mayo?, que permiten analizar la carga de trabajo y la actividad del centro de salud; así como el estudio para redistribuir cargas de trabajo entre profesionales; o el primar determinados puestos de trabajo de difícil cobertura.
¿Y ahora?
Después de un primer borrador con 175 actuaciones a corto, medio y largo plazo, este nuevo documento alcanza las 200. De ellas, 80 deben implementarse en menos de seis meses, mientras que el resto cuentan con un período más amplio de aplicación. Paralelamente a este documento se han creado al menos dos órganos para mejorar el funcionamiento de este sistema, el comité de expertos y el consello técnico, este de carácter permanente, para proponer soluciones a los problemas de la primaria. Tanto estos entes como los sindicatos a nivel laboral, y las sociedades científicas y colegios profesionales en su labor de vigía de la mejor práctica clínica y atención al paciente, estarán atentos al desarrollo de todas las medidas.