Asesinadas antes de superar los 30

María Pérez

GALICIA

Restan pocos días para que los juicios por los crímenes contra Diana Quer y Ana Enjamio comiencen. Los suyos son solo dos nombres de una lista negra demasiada extensa de mujeres jóvenes muertas de manera violenta

10 nov 2019 . Actualizado a las 05:00 h.

A manos de sus parejas o exparejas, como Ana Enjamio, o atacadas por un desconocido con terribles intenciones, como Diana Quer. Al menos de una decena de mujeres jóvenes, demasiado jóvenes, fueron asesinadas en Galicia en la última década. Ellas ponen nombre y rostro a una lacra que no cesa.

SEPTIEMBRE DE 2019

Alba Boquete Jamardo. 27 años. Estaba en Valga con su madre, María Elena, de 58 años, y su hermana Sandra, de 39, cuando el exmarido de esta las mató a tiros a las tres, delante de sus propios hijos, de 4 y 7 años. Alba había abierto un servicio de logopedia en Pontecesures y colaboraba con asociaciones como Amencer-Aspace.

2016

Año negro. En pocos meses, cuatro terribles crímenes truncaron la vida de tres jóvenes mujeres.

Tatiana Vázquez. 24 años. La joven apareció asesinada en abril, con medio centenar de puñaladas, en el interior de un coche en Lugo. El año pasado un jurado popular consideró culpable del crimen a su pareja, Ibrahima Ndiaye, al que también atribuyó un delito de malos tratos durante el tiempo que duró la relación. Fue condenado a 27 años de prisión.

Diana Quer. 18 años. El 22 de agosto del 2016 la joven madrileña de 18 años desapareció cuando volvía de las fiestas de A Pobra. Tras casi 500 días sin noticias de ella, su cadáver fue encontrado en una fábrica abandonada de la parroquia de Asados en Rianxo. Su asesino y violador, José Enrique Abuín Gey, el Chicle, está a punto de ser juzgado. Se pide para él prisión permanente revisable.

Elena Marcu. 30 años. El 16 de diciembre su expareja acabó con su vida. Adrián Burlacu entró en el domicilio de la mujer en Santiago y le asestó varias puñaladas que acabaron con su vida pocos días después. La joven estudiaba un ciclo de Formación Profesional de Farmacia que nunca pudo acabar.

Ana Enjamio. 25 años. Con 28 puñaladas asestadas en la oscuridad de un portal culminó su expareja, César Adrio, el asedio de varios meses al que había sometido a la joven ingeniera. El hombre no había aceptado el final de su relación, así que la madrugada del 17 de diciembre esperó en la entrada de su domicilio de Vigo a que la joven regresara de una cena de Navidad y la mató. El juicio por el crimen comenzará el próximo jueves.

JULIO 2015

Beatriz Rodríguez. Su cuerpo y el de su pareja, Sergio, aparecieron en una zona boscosa de Arbo. El asesino de ambos fue Arturo Domínguez, con quien Beatriz había mantenido una relación de nueve años. Domínguez no aceptó el final y acabó con la vida de su expareja y su nuevo novio disparándoles con una escopeta. Fue condenado a 40 años de prisión.

JUNIO 2012

Iria García. 28 años. Esta joven vecina de Narón denunció ante la policía las amenazas de muerte vertidas por su expareja, Óscar Ferreño, con quien había terminado año y medio antes y que no soportaba verla con nadie más. Se impuso al hombre una orden de alejamiento. No la cumplió. El 25 de junio degolló a Iria en Xuvia.

MAYO 2011

Gloria García. 19 años. Cuidaba de su hermano menor, de dos años, cuando su exnovio, un hombre de 30 años, se presentó en la vivienda familiar, en la localidad de Noia, y la acuchilló. Fue encontrada todavía con vida por su otro hermano, pero no fue posible salvarla. Gloria estudiaba en la Facultad de Educación de la USC. «Ni olvidamos, ni perdonamos» rezaba la pancarta con la que sus compañeros se despidieron de ella días después.

2009

María Socorro da Silva. 26 años. En el mes de febrero su cuerpo sin vida apareció en aguas del río Avia. Allí la arrojó uno de sus clientes ­-la joven ejercía la prostitución en la ciudad de Ourense-, tras dispararle, envolverla en un plástico y trasladarla en su coche hasta el lugar donde se deshizo del cadáver. Los colectivos de inmigrantes de Ourense recaudaron dinero para repatriar sus restos a su Brasil natal.

Laura Alonso. 19 años. La desaparición y el posterior hallazgo del cadáver de la joven en agosto del 2009 estremeció al pueblo de Toén y dejó rotas dos familias: la de la propia Laura y la de su agresor, Javier Cruz. Eran vecinos, se conocían desde niños y habían mantenido una relación. El 23 de agosto del 2008 quedaron, discutieron y él la estranguló, para después esconder su cuerpo en el monte. Inicialmente se le consideró culpable de asesinato pero el TSXG lo rebajó a homicidio y fue condenado a 15 años de cárcel.