La Guardia Civil da credibilidad a la versión de las 3 niñas que denunciaron un intento de rapto en A Laracha

Antonio Longueira Vidal
Toni Longueira A LARACHA

GALICIA

Plaza Maximino Canedo de A Laracha donde las chicas aseguraron que hubo el intento de rapto
Plaza Maximino Canedo de A Laracha donde las chicas aseguraron que hubo el intento de rapto J. M. CASAL

Ninguna de ellas titubeó al hablar de lo ocurrido, no dieron versiones enfrentadas o contradictorias y no dudaron sobre lo ocurrido

14 nov 2019 . Actualizado a las 21:12 h.

Cuando una persona, o varias, interpone una denuncia por un hecho que no suele ser habitual, y menos en la Costa da Morte, surgen las dudas sobre la veracidad del testimonio entre las fuerzas de seguridad, dudas amplificadas también desde las redes social. Y más, cuando los que denuncian son menores.

Sin embargo, en la Guardia Civil otorgan completa credibilidad a la versión facilitada por tres niñas, residentes en el casco urbano de A Laracha, con edades comprendidas entre los 13 y 14 años, que el pasado sábado, día 9, por la tarde, denunciaron haber sido víctimas de un intento de rapto por parte de dos individuos «de raza blanca y de unos 40 años», uno de ellos esgrimiendo un arma blanca, cuando se encontraban en el parque Maximino Canedo de A Laracha.

Para argumentar que las menores dieron una versión veraz, en el instituto armado analizaron varios aspectos de las declaraciones de la niñas. Y la versión ofrecida por las tres «es muy creíble», según las fuentes consultadas. Ninguna de ellas titubeó al hablar de lo ocurrido, no dieron versiones enfrentadas o contradictorias y no dudaron sobre lo ocurrido sobre las ocho y media de la tarde del pasado sábado. El problema, en todo este caso, es que las menores, víctimas de un ataque de pánico, huyeron del lugar sin grabar en la retina algún aspecto relevante que permita a los agentes dar con los dos individuos. Lo único que aseguraron las menores es que estos dos sujetos salieron de sendos vehículos, uno de color negro y otro gris. Esos son los datos con los que trabajan los agentes encargados de la investigación.

Una vez que los agentes tuvieron claro que las niñas contaban la verdad trasladaron a los responsables de la Comandancia de la Guardia Civil de A Coruña lo ocurrido, donde, a su vez, ampliaron la alerta al resto de puestos de Galicia por si en alguna localidad o demarcación se produjo algún hecho similar, aunque no haya sido denunciado. Hasta la fecha, y seis días después de lo ocurrido, no ha habido avances significativos en las pesquisas. Mientras la investigación avanza, la Guardia Civil incrementó la vigilancia en carreteras, tanto principales como secundarias, en especial en aquellas que tienen enlaces con A Laracha y Carballo, en busca de vehículos potencialmente sospechosos.