Archivan por defunción los cargos contra el narco de Brasil con doble identidad

Javier Romero Doniz
Javier Romero VIGO / LA VOZ

GALICIA

Ficha policial brasileña de Sérgio Roberto de Carvalho con sus huellas, que coinciden con las tomadas a Paul Wouter tras su detención en agosto del 2018 por un alijo en Galicia.
Ficha policial brasileña de Sérgio Roberto de Carvalho con sus huellas, que coinciden con las tomadas a Paul Wouter tras su detención en agosto del 2018 por un alijo en Galicia.

Se notificó su muerte dos días después conocerse que la Fiscalía le pedía 13 años y 6 meses de prisión; las huellas dactilares demuestran que realmente es un gran capo refugiado en España

25 nov 2020 . Actualizado a las 17:20 h.

La Audiencia Provincial de Pontevedra, en Vigo, archiva los cargos por narcotráfico contra al empresario Paul Wouter, nacido en 1965 en Guyana, como el principal acusado de los 1.700 kilos de cocaína incautados a bordo del Titán III en agosto del 2018. El motivo es su fallecimiento, notificado a las autoridades judiciales dos días después de conocerse la petición de cárcel de la Fiscalía contra él (13 años y 6 meses) por el mismo alijo y diez después de la jornada en la que murió, al parecer, enfermo de covid.

Pero Paul Wouter, recuerda la resolución judicial, no es quién dice ser. Sí Sérgio Roberto de Carvalho, brasileño e igualmente narcotraficante. Las huellas dactilares demuestran que ideó la identidad de Wouter para instalarse en España, concretamente en la Costa del Sol. Escapaba de las autoridades de sus país, que lo acusan de ser un magnate del tráfico globalizado de cocaína entre Sudamérica, Europa y Asia. Incluso utilizaba, para reforzar la coartada, un pasaporte auténtico de Surinam que habría comprado a base de sobornos.

La muerte de Wouter se notificó tras conocerse la pena de cárcel por el alijo del Titán III, a pesar de que el fallecimiento, según consta, se remonta una semana y media. La Fiscalía Antidroga de Pontevedra pedía 13 años y 6 meses por tráfico de drogas y organización criminal. Delitos que, a la fuerza, se archivan por defunción. Está por ver qué pasa con Carvalho, aún desaparecido, y que para algunos de sus rastreadores recuerda un tanto a Paco Paesa, espía español que fingió su muerte tras una vida en los bajos fondos del Estado.