El Gobierno baraja una cuota anual para las autovías mientras no implanta peajes
GALICIA
Planea un precio «considerablemente inferior» a los 90 euros de algunos países
08 nov 2021 . Actualizado a las 12:45 h.El Gobierno central está decidido a cobrar por el uso de las autovías y también de las autopistas que han pasado a ser gratuitas. Baraja hacerlo a medio plazo mediante una tasa cuya adquisición se reflejará en un distintivo o pegatina en el coche, fórmula que ya está activa en once países europeos. Denominada generalmente como viñeta, habilita según el país el paso por carreteras, autovías e incluso autopistas por plazos de tiempo que van de una semana a un año sin pagar más a mayores. Una especie de peaje de tarifa plana.
Fuentes del Ministerio de Transportes aseguraron este viernes a que el coste de la viñeta en España «será considerablemente inferior» a los 92,50 euros en los que se vende el pase anual en Austria, el tercer país europeo donde es más cara dicha tasa por circular por autovías y autopistas. Por encima están los 129 euros que cuesta este año en Hungría o los 180 que fija Moldavia. El precio más común para un año ronda los 50 euros, moviéndose en ese nivel Bulgaria (49 euros), Eslovaquia (50), Eslovenia (55) y República Checa (59).
En todo caso, el secretario general de Infraestructuras del Ministerio de Transportes, Sergio Vázquez, indicó este viernes en Barcelona que la viñeta no sería más que un método temporal mientras se ultima una tarificación a la carta en función del vehículo, combustible, distancia recorrida y momento del día de su tránsito. «Las directrices europeas hacen que todos los países transiten de la viñeta al pago por distancia recorrida, y esta permite hacer una política de movilidad sostenible, más evolucionada al permitir introducir tarificación con variables como la congestión de las vías y es más justa al ir en función del trayecto realizado», indicó el alto cargo ministerial en un foro en Barcelona.
El caso de Portugal
Vázquez remarcó que la mayoría de los países que cobran en sus autovías adoptaron originalmente la viñeta y ahora se plantean cobrar como prefiere la UE, por kilómetros recorridos. «Eso es algo que tenemos que evaluar», dijo, apuntando a que el cobro como el que se hace en Portugal con pórticos y cámaras o los que emplean sistemas satelitales basados en el telepeaje requieren una tecnología menos asequible en tiempo para su instalación y costes. El sistema de la viñeta permitiría al Gobierno empezar a cobrar en las autovías a finales del 2023 o principios del 2024 como anunció a la Unión Europea entre los compromisos del Plan de Recuperación remitido para acceder a los fondos comunitarios creados contra la crisis del covid.
«Lo tenemos que evaluar —insistió el secretario general de Infraestructuras—, pero teniendo en cuenta que el final del camino siempre va a ser el del pago por distancia», concluyó dejando claro que el actual ministerio está decidido a cobrar en autovías, autopistas gratuitas y podría hacerlo en carreteras convencionales determinadas para financiar con su recaudación su mantenimiento y disuadir en lo posible el uso del vehículo privado.
El Ministerio de Transportes aduce que el mantenimiento de la red viaria estatal acumula ahora un déficit de 8.000 millones de euros.
«En ningún caso sería nada comparable con las tarifas actuales de las autopistas»
La asociación de grandes constructoras Seopan fue la primera que propuso un precio a cobrar en las autovías para que el Estado lograse una recaudación extra con la que mantener la red viaria. Su estimación apuntaba a una tarifa de 9 céntimos por kilómetro recorrido para turismo y 19 transportes pesados. Un viaje entre Vigo y Ourense costaría 8,82 euros; de A Coruña a Lugo, 9,39. El Ministerio de Transportes, que elude oficialmente señalar precios ya que mantiene que todavía no ha cerrado su propuesta, llegó en el mandato de José Luis Ábalos a aludir a un coste de 1 céntimo por kilómetro.
«¿Vamos a volver a pagar en las autopistas que acaban de hacerse gratuitas?», preguntó ayer en un foro sobre movilidad el exalcalde y exministro Joan Clos. «En ningún caso sería lo mismo, en ningún caso», enfatizó el secretario de Infraestructuras Sergio Vázquez. Y contrapuso que el usuario pague ya por utilizar las infraestructuras de telecomunicaciones, energéticas, aeroportuarias, portuarias, ferroviarias «y no pagamos por el uso de las infraestructuras viarias y su mantenimiento. Hay que abordarlo por la financiación de las cuentas públicas y como política de movilidad sostenible».
Así funciona la viñeta: una tarifa plana en pegatina y ahora digital
El Gobierno prevé la adopción de la viñeta como método de recaudación en sus autovías. Pero la mayoría de los once países de Europa que cuentan con dicha tarifa plana la exigen solo para transitar por las autopistas del país. Austria y Bulgaria la reclaman en diversas autovías y carreteras también.
¿Cómo funciona?
Un adhesivo o tarjeta colocada en el parabrisas demuestra el pago y el plazo de validez, que va de una semana, a un mes, trimestre o año, según el país. República Checa y otros no exigen ya su colocación, pues cuentan con sistemas de control de las matriculas asociadas al pago de la tasa, como ya ocurre con el estacionamiento controlado en las calles en ciudades de Galicia.
¿Qué países la tienen?
Es un modelo implantado en el centro y este de Europa. Austria adoptó la viñeta en 1997 y está en uso también en Suiza, República Checa, Eslovenia, Montenegro, Eslovaquia, Hungría, Bielorrusia, Moldavia, Rumanía y Bulgaria.
¿Dónde se vende?
En la mayoría de los casos en las áreas de servicio próximas a la frontera. Dentro del país en gasolineras, quioscos, oficinas de correos, talleres y clubes automovilísticos. Austria vende una viñeta digital por Internet también, como República Checa, Eslovaquia, Hungría o Bulgaria. Los dos últimos la facilitan además mediante aplicación de telefonía móvil.
¿Cuánto cuestan?
Es un sistema que tiene muy presente el uso que hacen los extranjeros de las carreteras de cada país. Por ello, diez de los once que han adoptado la viñeta ofrecen modelos para una semana a partir de 3 euros en Rumanía o los 4 de Moldavia a los 14 para quince días de Bielorrusia, o los 10 euros en las que está tasada la entrada en el país en Montenegro. Para un mes oscilan de los 7 euros de Rumanía a 22 de Bielorrusia. Bulgaria los facilita para tres meses por 28 euros, y Eslovenia y Moldavia para medio año por 30 y 85 euros respectivamente. Para un año los precios más bajos son los de Rumanía (28); Suiza (36) y Bulgaria (75). Los más caros son para todo el año los de Moldavia (180), Hungría (129), Austria (92,50) y Bielorrusia (75).
¿Que pasa si no se paga?
Los países que introdujeron la viñeta dejan a sus policías o servicios especiales de control la vigilancia sobre el pago de la tasa, que se ejerce controlando las pegatinas y tarjetas o comprobando si la matrícula se ha asociado a alguna viñeta digital. Austria, por ejemplo, impone multas de 120 euros pero si no se pagan en el acto pueden llegar a 3.000. En Bulgaria la sanción asciende a 153 euros y a 150 en Eslovaquia, que la rebaja a 100 por pronto pago y los automovilistas incluso solo pueden ser multados por este concepto una vez al mes.
¿Exime de otros peajes?
En general sí, pero Rumanía cobra peajes a mayores en algunos de sus túneles. Bulgaria lo hace en sus puentes con Rumanía y la República Checa, en cambio deja gratis sus circunvalaciones.