Feijoo, candidato único a la presidencia del PP nacional

Xosé Vázquez Gago
Xosé Gago SANTIAGO / LA VOZ

GALICIA

El presidente de la Xunta, Núñez Feijoo, el día del acto de presentación de su candidatura a liderar el PP
El presidente de la Xunta, Núñez Feijoo, el día del acto de presentación de su candidatura a liderar el PP XOAN A. SOLER

Los 55.000 avales que presentó en Génova, una cifra récord, hacían muy improbable que se presentase un contrincante

10 mar 2022 . Actualizado a las 21:00 h.

Alberto Núñez Feijoo ha sido proclamado candidato único a la presidencia del PP. El responsable de la organización del congreso extraordinario de Sevilla, el eurodiputado Esteban González Pons, ha confirmado que es el único aspirante. Los 55.000 avales que Feijoo presentó el miércoles en la sede popular de la madrileña calle Génova hacían muy improbable que se presentase otro candidato. Los que había anunciado una candidata de Valencia no han sido validados, ya que solo entregó 17 de militantes al día en el pago de sus cuotas.

Esa cifra supera la de apoyos presentados por cualquiera de sus predecesores y multiplica por 11 los que reunió el presidente saliente del PP, Pablo Casado. El récord da testimonio de las esperanzas que los populares tienen puestas en el aún jefe del Gobierno gallego, a quien los barones regionales rogaron que se presentase para salvar la crisis interna.

Ha pasado casi un mes desde esa implosión que ha llevado a Núñez Feijoo a dar el paso que no quiso dar en el 2018, cuando rechazó las invitaciones para que optase a la presidencia nacional.El estallido se produjo cuando Isabel Díaz Ayuso, presidenta de la comunidad de Madrid, denunció en público una trama de espionaje contra ella supuestamente organizada por el entorno de Pablo Casado. El presidente del PP, lejos de evitar la confrontación, acusó a Ayuso de favorecer a su hermano mediante la concesión de contratos otorgados por la Administración que preside. Sus palabras abrieron una crisis sin precedentes en el partido. Los afiliados se manifestaron frente a la sede de Génova para exigir la marcha de Pablo Casado, que trató sin éxito de atrincherarse.

Ante la desafección total de las bases, con algunos diputados advirtiendo del riesgo de desaparición del partido, Feijoo se significó y, después de que Casado, con sus acusaciones contra Ayuso hiciese irreversible la crisis, le pidió que tomase la «última decisión»; es decir, que dimitiese.

El apoyo de las bases

Su figura ya era entonces invocada por los líderes regionales para expulsar a los demonios de la división interna, que hace ahora 40 años volaron por los aires a otra formación clave para la democracia española, la UCD.

Feijoo ha agradecido el respaldo de los barones, cuyas posibilidades en las próximas citas municipales y autonómicas se verían lastradas si la crisis interna se prolongaba, pero ha insistido en la importancia del apoyo de las bases, que es clave para ejercer el liderazgo de forma independiente. Lo explicó de forma gráfica cuando dijo que el voto de un dirigente regional vale lo mismo que el de «un afiliado de la sierra de Albarracín o de Xinzo de Limia», es decir un voto.

Por ese motivo, aunque no tenga un rival enfrente, el futuro presidente del PP hará una gira por las 17 comunidades autónomas españolas. Ademas de considerarlo una cuestión de «respeto a las bases», la campaña permitirá al candidato de explicar su proyecto político a los afiliados, y escuchar las aportaciones que quieran hacer a la nueva etapa del PP.

La campaña arrancará este viernes con actos en Valencia, donde asistirá a la Mascletá y participará en un evento con el líder de los populares valencianos, Carlos Mazón; y Murcia, en donde compartirá otra intervención con el presidente de esa comunidad, el popular Fernando López Miras. El sábado, Feijoo estará en Santa Cruz de Tenerife. El lunes visitará Palma de Mallorca y Barcelona. El martes viajará a Zaragoza, Madrid y Toledo. El miércoles hablará en Santiago de Compostela. El jueves estará en otros puntos del norte, en Oviedo y Santander. El viernes será uno de los días más intensos de la gira, con actos programados en Bilbao, Pamplona y Logroño. El sábado, penúltimo día de campaña, intervendrá en Valladolid y en Málaga, a donde se espera que se trasladen también militantes de las ciudades autónomas de Ceuta y Melilla. Finalmente, la gira terminará el domingo día 20 en Mérida.

Las fechas de la campaña, explicó Feijoo esta mañana, en su comparencencia habitual tras el Consello de la Xunta, coinciden con las de un viaje oficial que tenía previsto a Uruguay y Colombia, por lo que no se alterará, dijo, la agenda de la Xunta. Esta mañana tampoco avanzó cómo será su relevo en la presidencia y al frente del PPdeG. Se limitó a señalar que lo dirá en el «tiempo y foros adecuados».

La campaña discurrirá bajo el lema «Preparados». Es el mismo mensaje que centró su discurso del miércoles en Génova, cuando formalizó su candidatura: «Estoy preparado, estamos preparados, para abrir un nuevo tiempo en el partido y en España».

Esas palabras enlazan a su vez con las que lanzó en el multiusos Fontes do Sar de Santiago hace una semana, cuando anunció que se presentaría: «No vengo a insultar a Pedro Sánchez, sino a ganar a Pedro Sánchez».

Con esos discursos, el presidente gallego buscaba reactivar al partido y convencer a las bases de que es posible presentar una alternativa al Gobierno de PSOE y Podemos. Al mismo tiempo insistió en que se debían cerrar las heridas internas y llamó a concentrarse «en el futuro». También apuntó que «España no necesita seguir hablando de políticos, sino de políticas, mientras se habla de políticos no se enfrentan los graves problemas de la realidad». A su juicio, el congreso extraordinario de Sevilla de los días 1 y 2 de abril, más que de confrontación, debía «salir bien» y servir para la construcción del nuevo proyecto popular. Sin rivales, podrá ser así.