Miguel Tellado sustituyó al portavoz popular en el turno de réplica. La votación no peligró por la mayoría absoluta del PP. Rueda fue investido presidente con 41 votos favorables
12 may 2022 . Actualizado a las 21:46 h.El portavoz parlamentario del PPdeG, Pedro Puy, sufrió un infarto durante el debate de investidura de Alfonso Rueda en el Parlamento de Galicia. Tuvo que ser traslado al hospital Clínico de Santiago, según informó el grupo parlamentario popular y el presidente de la cámara, Miguel Santalices. Fue atendido por la Unidad de Hemodinámica, que le aplicó el «tratamento correspondente», según el PPdeG, y quedó ingresado en la unidad de enfermedades coronarias. Según el entorno del portavoz, se está recuperando y está fuera de peligro.
Puy, de 60 años, se sintió indispuesto tras acabar su primera intervención. Ante los síntomas, la diputada lucense del PPdeG Encarna Amigo, que es doctora, propuso pedir una ambulancia. En las primeras pruebas ya se confirmó que se trataba de un problema cardíaco.
Para la contrarréplica del PPdeG fue el aún secretario general del PPdeG y vicesecretario de Organización Territorial del PP, Miguel Tellado, quien tomó la palabra en nombre del grupo popular. La dolencia de Pedro Puy y la próxima marcha del propio Tellado al Senado dejan, a la espera de la recuperación del primero, la representación de PP en manos de las otras dos viceportavoces: Elena Candia y Paula Prado.
Los tres portavoces del Parlamento desearon una pronta recuperación a Puy. La investidura de Rueda no peligraba, ya que el PP supera en tres diputados la mayoría absoluta, suficiente para votar a favor de su candidatura para convertirse en sexto presidente de la Xunta.
Esa situación médica se dio después de su intervención en el pleno. Pedro Puy fue el tercero en hablar. Se dirigió «ás oposicións», apuntando a su división, para reivindicar la estabilidad que su partido ha dado a Galicia, esgrimiendo la elevada confianza de los gallegos en sus instituciones, entre las más elevadas de España. Les reconvino, por tanto, para que no caigan en el populismo, y criticó las palabras de Pontón sobre la ilegitimidad del cambio en la presidencia. Para su «sorpresa», remarcó, el PSdeG también ha empleado ese argumento. Puy les advirtió que no es lo mismo criticar el programa del candidato que «subverter a lexitimidade» de su elección, lo que supone que o no entienden el sistema parlamentario o intentan engañar a los ciudadanos, denunció.
Al Bloque le reprochó que mantenga que Galicia es «unha colonia» de España cuando existe la posibilidad real de que Núñez Feijoo sea presidente del Gobierno. Sería «a primeira vez» en la historia del imperialismo que el colonizado llegaría a dirigir la potencia colonizadora.
La defensa de la gestión gubernamental, después centrada en las cifras económicas y en la gestión, permitió a Puy reforzar el discurso inaugural de Rueda y las propuestas que presentó ese día. En sus conclusiones, combatió la idea de que haya una alternativa viable al PP. Señaló que la insistencia de PSOE y BNG en proclamarse como alternativas sólidas y de Pontón, al intentar ser visualizada como presidenta, solo demuestran a «súa febleza» y la «inexistencia en sentido literal» de esa alternativa, porque no hay una, «senón dous e perfectamente incompatibles». Puso ejemplos, como la defensa del cupo foral por parte del Bloque, y que el PSOE rechaza; la defensa de Pontón de una tarifa eléctrica, mientras acusan a los socialistas do «bum eólico»; o que el BNG considere a la OTAN «belicista», aunque los socialistas defienden la cooperación con ella. Por lo tanto, concluyó Puy, ambos grupos hablaron de cosas «que non van poder facer nunca». «As dúas oposicións», subrayó, presentaron «propuestas irrealizables» que contrapuso a la «fortaleza» que a su juicio demostró el discurso de Rueda.
En la réplica que ya dio Miguel Tellado, este -en una intervención que tuvo que improvisar- reprochó a Ana Pontón que va de «derrota en derrota ata a derrota final». Al PSOE lo criticó por su «sucursalismo» y por ser incapaz de reconocer los méritos colectivos de Galicia. Tellado reivindicó el legado político de Feijoo, que se marcha de Galicia «invicto», y se mostró seguro de que Alfonso Rueda mantendrá la racha con una quinta mayoría absoluta.«Hai presidente, hai presidente para Galicia» subrayó Tellado, quien remarcó que «hai oposición, ben dividida, pero non alternativa ao Partido Popular». En sus conclusiones, citó a Puy: «Galicia é unha tarefa permanente que require do traballo de todos».