El BNG ultima su modelo para atención primaria con el que liderar la oposición a la Xunta
GALICIA
El plan detallará el «decálogo de medidas» de los nacionalistas tras reunirse con colectivos sanitarios y después del éxito de la manifestación convocada por SOS Sanidade Pública
19 feb 2023 . Actualizado a las 05:00 h.La política gallega marcó en rojo el 12 de febrero en el calendario. Tanto el Gobierno gallego, consciente de que ocultar un fantasma lo hace aún más grande, como la oposición. Durante semanas, líderes y diputados de BNG y PSdeG insistieron sobre la gran movilización que iba a despertar la manifestación convocada por SOS Sanidade Pública, evidenciando el malestar social con la situación del sistema de salud público gallego y, en especial, el colapso de la atención primaria. El camino hasta entonces fueron plenos casi monográficos sobre la sanidad, con varias interpelaciones al conselleiro del ramo, Julio García Comesaña, y una sesión de control donde los dos portavoces de la oposición formularon la misma pregunta al presidente Alfonso Rueda. Lo mismo ocurrirá en la sesión de este miércoles tras la «maior mobilización dos últimos vinte anos en Galiza», en palabras de la nacionalista Ana Pontón.
Ambos partidos coinciden en la necesidad de reformular el modelo sanitario gallego. Incluso comparten demandas, especialmente la de ampliar la cartera de servicios en atención primaria incorporando personal de distintas especialidades, como enfermeros, fisioterapeutas o administrativos con los que aligerar la presión asistencial de los médicos. Pero el desafío, en términos electorales, pasa por capitalizar esa respuesta social y convencer a los votantes de que su propuesta es la más acertada para solventar los problemas que ahogan al Sergas. En ello se ha centrado el Bloque en los últimos meses.
La alternativa al PP
El histórico resultado en las autonómicas del 2020 permitió al BNG vislumbrar con claridad que podría liderar un Ejecutivo en Galicia por primera vez. El día que el Parlamento debatió la investidura de Alfonso Rueda como presidente, Ana Pontón llevó un discurso sin apenas alusiones al candidato a suceder a Alberto Núñez Feijoo. Lo que hizo fue ofrecer el que sería su programa de gobierno durante 35 minutos.
La portavoz nacional del Bloque expuso ya entonces su «plan de choque» de 200 millones de euros «para salvar a atención primaria». Desde entonces, y acelerado durante el debate sobre los Presupostos aprobados a final de año, los nacionalistas fueron ofreciendo nuevas píldoras sobre su política sanitaria alternativa a la del PP al frente de la Xunta. El BNG ultima ese plan asentado en tres pilares: recursos financieros, personal sanitario suficiente y ampliación de la cartera de servicios, con el foco puesto en la psicología clínica.
«O modelo actual de médico-enfermeira non ten sentido, é do século XIX. Hai moitos profesionais que poderían entrar en primaria e mellorar a atención que se presta», explica Montse Prado, portavoz de Sanidade. El pasado miércoles acompañó a Pontón en una reunión de trabajo celebrada en el Parlamento junto a representantes de colectivos y colegios de fisioterapia, terapia ocupacional, logopedia, podología, celadores, farmacia o higiene dental para terminar de apuntalar ese plan que ofrecer como alternativa al modelo actual. «O que nos din é que cada vez hai máis xente con menos capacidade económica sen atención. Hai unha clara discriminación», denuncia Prado frente al «decálogo de medidas» que manejan los nacionalistas. «Pode facerse a curto prazo. A nivel lexislativo é posible», subraya la parlamentaria.
