Solo nueve campus españoles se mantienen en el top del medio millar
15 ago 2023 . Actualizado a las 08:00 h.Las universidades españolas han sufrido un descalabro entre la élite internacional. El Ránking Académico de las Universidades del Mundo (ARWU), elaborado por la Universidad Jiao Tong de Shanghái, otorga a los centros de educación superior españoles su peor resultado en quince años en esta prestigiosa clasificación, que lidera un año más (el vigesimoprimero consecutivo) la estadounidense Harvard.
El listado de las 500 mejores universidades del mundo, conocido como el ránking de Shanghái, la clasificación más antigua e influyente, incluye en el 2023 en su selecto club nueve campus españoles, dos menos que el año pasado y cuatro menos que en los años 2019 y 2020, sus mejores registros hasta hoy. Es un mal resultado. El más negativo junto al cuatrienio 2004-2008 que, con los mismos nueve centros, marcaba la peor clasificación histórica.
En el caso de las gallegas, solo las universidades de Santiago y Vigo aparecen entre las mil primeras desde hace años, pero la USC experimenta una caída espectacular. Llevaba tres ediciones consecutivas entre las 500 mejores del mundo y ahora aparece entre los puestos 601 y 700. Tanto es así que Vigo, que se mantiene por cuarto año consecutivo entre el 501 y el 600, adelanta a la institución compostelana. La Universidade de Vigo tuvo su mejor posición en el 2012, entre las quinientas mejores, mientras que en los años 2016 y 2017 Santiago logró situarse entre los puestos 301 y 400. A Coruña no aparece en el último decenio.
La única nota positiva a nivel estatal es que, aunque el peso académico de España decae, todavía casi una quinta parte de sus campus públicos (el 18 %) sigue entre la élite planetaria. Es la duodécima potencia universitaria del mundo. Como ocurre desde la primera edición del estudio (2003), no hay españoles entre los cien primeros, pero este año tampoco hay campus nacional alguno entre los 200 primeros. La Universidad de Barcelona, la única capaz de ubicarse durante casi una década entre los puestos 150 y 200, ha pinchado, como ya le ocurrió en el 2017, y ha caído al escalón del 201 al 300. La razón que aleja a los centros nacionales de los primeros puestos es que el ránking de Shanghái valora esencialmente la investigación de muy alto nivel (sobre todo la científica y técnica) por encima de la docencia y prima con hasta un 30% de puntos a las universidades con alumnos y profesores en posesión del Premio Nobel o la Medalla Fields (Matemáticas), de los que las instituciones españolas carecen.
España tiene una presencia más bien modesta en la élite, pero, en cambio, es una potencia entre la clase media de la educación superior. Tiene un alto nivel de calidad media en la gran mayoría de sus campus. Así lo demuestra el segundo ránking mundial publicado por la Universidad de Jiao Tong, el que define las universidades que ocupan los puestos del 501 al 1.000 (candidatas a saltar en próximos años al top 500), que incluye a otros 29 centros españoles, los mismos que en el 2022 y su mejor registro hasta el momento entre la clase media universitaria mundial. La élite española queda reducida este curso a nueve centros, tras la salida del top 500 de las universidades de Sevilla y Santiago. Además, cinco de los nueve supervivientes caen en el escalón clasificatorio.
Nadie desbanca a Harvard
Las diez primeras posiciones del ránking no se mueven. Están copadas por las ocho grandes estadounidenses, con Harvard y Stanford a la cabeza, y por las dos ilustres británicas, Cambridge (cuarta) y Oxford (séptima). No hay posibilidad de encontrar un campus que no pertenezca a ambos países hasta la posición 15, donde se ubica la Universidad París- Saclay.