Rueda, Page y Clavijo celebran la consolidación autonómica como garantía de igualdad entre los territorios

GALICIA

Martina Miser

Los tres presidentes alertan en el Foro La Toja de que las concesiones a una parte pueden quebrar una armonía del conjunto, porque las cesiones se pagan entre todos; el máximo mandatario de Castilla-La Mancha asegura que quiere creer que su partido actuará dentro de la Constitución, que no habrá amnistía ni consulta, y que Sánchez no «gobernará con una camisa de fuerza»

30 sep 2023 . Actualizado a las 21:30 h.

El incierto y turbulento momento político que vive España acaparó la atención de la mesa de presidentes autonómicos que cada año se celebra en el Foro La Toja. Alfonso Rueda, Emiliano García Page y Fernando Clavijo, máximos mandatarios de Galicia, Castilla-La Mancha y Canarias, hicieron ayer una encendida defensa del modelo autonómico como una historia de éxito y conquistas, que ha permitido resolver problemas históricos, modernizar los territorios, avanzar en la cohesión social y que garantiza la igualdad de los ciudadanos. Un marco que, según han expuesto, se ve amenazado ahora por las negociaciones abiertas por Pedro Sánchez con el independentismo catalán, porque las cesiones que se hagan se terminarán pagando entre todos. El presidente gallego defendió la sana competitividad entre autonomías, pero dentro de un conjunto común, y celebró que las voces que apelan a una recentralización sean en estos momentos minoritarias. También advirtió del riesgo que supone exigir competencias sobre la base de restar poder al Gobierno central, en clara alusión al BNG, y apostó por reclamar aquellas parcelas donde sí es necesario, como es la gestión del litoral.

Tanto Page como Clavijo se refirieron al peligro de condonar deudas históricas, porque todos los territorios las tienen contraídas y porque supondría abrir un escenario muy peligroso, máxime cuando las comunidades tienen un modelo de financiación del año 2009 cuando estamos a casi a punto de entrar en el 2024, y se han generado nuevas necesidades de gasto para financiar servicios esenciales, como son la educación y la sanidad. «Las comunidades nos encontramos ahora elaborando los presupuestos, en un momento clave: y no tenemos por parte del Gobierno datos que son fundamentales, como qué es lo que nos corresponde de ingresos del Estado y eso es porque se están ventilando dos cuentas», lamentó Rueda, quien insistió en que el modelo común es lo que «nos iguala a todos».  

Sobre la idoneidad de emprender reformas, advirtieron no solo del riesgo que supone tocar un sistema que ha funcionado, sino de hacerlo en este contexto marcado la confusión, en el que una parte tiene abierto un pulso con el Estado. «Vivimos un momento de zozobra, de inquietud, y lo que se palpa en la calle es que la gente está metabolizando con preocupación el ambiente político nacional; porque incluso yo tengo dudas, preguntas sin respuesta, pero quiero creer que mi partido está con la Constitución, y que como dijo Illa no habrá ni amnistía ni referendo: no creo que Sánchez quiera gobernar con una camisa de fuerza», sostuvo Page.

Los presidentes coincidieron en que Europa debe ser un espejo, que utiliza la pluralidad para unir, mientras que en España parece que sucede lo contrario, según el máximo mandatario de Castilla-La Mancha, quien llegó incluso a proponer algún tipo de filtro orgánico para que las decisiones que afectan a una parte e incumben al conjunto puedan adoptarse de un modo colegiado, en el que participen todos. Y en este sentido, recordó que las llamadas deudas históricas no son tales, porque son constitucionales, es decir, son deudas que arrancan desde 1978.

Los tres mandatarios de Galicia, Castilla- La Mancha y Canarias coincidieron en que el modelo autonómico ha contribuido a resolver el maleficio histórico del modelo de Estado, a resolver problemas territoriales y a acelerar la modernización económica de territorios que arrastraban problemas crónicos. Un logro, sostuvieron, que toca defender y sobre el que no cabe dar un paso atrás.