Se han registrado desbordamientos en los ríos Basteiro y Belelle en Neda; la provincia de A Coruña es la más afectada
14 nov 2023 . Actualizado a las 16:33 h.Las fuertes lluvias registradas en la última jornada han dejado más de doscientas incidencias en Galicia, cincuenta de ellas durante la noche. La mayor parte de las intervenciones del 112 estuvieron relacionadas con inundaciones en calles, carreteras, viviendas, bajos y garajes, así como con árboles caídos y desprendimientos de tierras y piedras.
Fene y Neda están siendo los concellos más castigados por los efectos del último fenómeno meteorológico adverso de nivel naranja por lluvias, con el caudal de los ríos en alza. De hecho, un semirremolque de achique y una furgoneta de la Axencia Galega de Emerxencias (Axega) se han desplazado a Fene para apoyar en las labores de restauración tras las fuertes lluvias e inundaciones.
La Xunta mantiene activo el Plan de Protección Civil Inungal ante la posibilidad de desbordamientos, como ha ocurrido en Neda, donde varias viviendas se han inundado tras la rotura de un muro en uno de los laterales del río Basteiro, en la parroquia de Santa María, donde el Belelle también se desbordó. Nadie ha sufrido daños, pero la situación es compleja por la altura del agua y por la corriente, lo que dificulta el acceso.
Uno de los vecinos señaló que el agua alcanzó hasta un metro y medio en su vivienda y que han perdido «absolutamente todo». Debido al caudal que traía el río, este rompió un muro y canalizó directamente el agua hacia su casa. «Rompió el portal, cruzó la carretera general, saltó para la casa y fue como un tsunami de repente», recuerda. La fuerza del agua se llevó sus electrodomésticos y muebles: «Todo lo que habíamos trabajado mi mujer y yo, nos hemos quedado sin nada».
Hay seis ríos que se encuentran bajo vigilancia por riesgo de desbordamiento debido a las precipitaciones caídas en las últimas semanas que se acumulan. Son Rego das Mestas (Valdoviño), Mandeo (Aranga), Castro (Cee), Dubra-Tambre (Val do Dubra), Barcala-Tambre (Negreira) y el Oitavén (Soutomaior).
Muchas personas han quedado atrapadas en sus casas. Desde la Axega recomiendan mantenerse en las zonas más altas de la vivienda mientras los equipos de emergencia establecen las medidas de seguridad necesarias para efectuar los rescates con el menor riesgo posible. Con ese objetivo trabajaban bomberos de Ferrol, el GES de Mugardos y agentes de la Guardia Civil y la Policía Local.
Esta mañana se incorporaron técnicos del grupo de apoyo logístico de la Axega con material y maquinaria destinada a la extracción de agua. La primera intervención fue en Fene, en la estada da Palma, donde los vecinos no podían acceder a sus viviendas.
Durante esta madrugada, la situación en este concello fue empeorando debido al aumento del nivel del agua, que, además, alcanza una fuerza de arrastre que hace muy difícil la llegada de los equipos de emergencias. Con todo, desde el 112 Galicia se solicitó la colaboración de los profesionales de Urgencias Sanitarias de Galicia-061, que prestaron atención telefónica e incluso enviaron dotaciones hasta los puntos más próximos a las personas por si fuese necesaria una evacuación de urgencia. Hasta este momento no ha sido necesario, y se sigue insistiendo en la recomendación de que las personas se mantengan en las partes más altas de las casas.
En Dumbría, la carretera DP-2302, al paso por Buxantes, está cortada debido a un movimiento de tierra, piedras y vegetación que bloqueó completamente el acceso a un garaje con dos coches atrapados y tres perros desaparecidos. De momento, ninguna persona resultó herida, pero los daños son importantes, al tratarse de un desprendimiento de 15 metros.
La provincia de A Coruña acumula con diferencia el mayor número de incidencias, y los concellos más afectados fueron Fene, Neda, Ferrol, Narón, Mugardos, Ares, Cabanas, Miño, Pontedeume, Outes, Dumbría y Mazaricos.