El PP aprueba en solitario los últimos presupuestos de la Xunta antes de las elecciones

Manuel Varela Fariña
Manuel Varela SANTIAGO / LA VOZ

GALICIA

Sandra Alonso

La oposición apunta al «fin de ciclo» de los populares al frente el Gobierno gallego después de ver rechazadas sus 1.400 enmiendas a las cuentas

19 dic 2023 . Actualizado a las 14:08 h.

No hubo sorpresas en el último trámite parlamentario de los presupuestos. El PP utilizó el rodillo de su mayoría absoluta para rechazar las 1.400 enmiendas que en conjunto habían presentado BNG y PSdeG a las cuentas -solo aceptó tres socialistas-, y dar luz verde a los Orzamentos de la Xunta, que entrarán en vigor el próximo 1 de enero. Será el penúltimo pleno del año, ya que por la tarde comenzará el pleno ordinario con el debate de tres textos legislativos. La oposición, en sus intervenciones, apuntó a que serán también los últimos de esta legislatura ante una convocatoria electoral que consideran inminente. «Deberían estar inquedos ante o exame» de los comicios del 2024, se dirigió la nacionalista Noa Presas a los diputados populares.

Tres horas y media antes de que el conselleiro de Facenda, Miguel Corgos, recibiese el aplauso de la bancada popular, y el abrazo y felicitación del presidente Alfonso Rueda, que regresó de un acto celebrado en Vilanova de Gaia (Portugal) para la votación, el Parlamento inició un debate que estaba ya decantado desde el momento en que la Xunta presentó su proyecto presupuestario hace dos meses. Presas, encargada de defender las enmiendas del Bloque, acusó al PP de haber convertido a la Xunta «nunha xestoría do Ibex 35» y de tener la «honra» de ser «a dereita máis neoliberal e insolidaria de todo o Estado».

Contrapuso las enmiendas de su grupo parlamentario como precisamente «todo o contrario», enumerando entre ellas las políticas en materia de vivienda o sanidad. «Están orgullosos de non aceptar as nosas propostas. Máis que nunha illa de estabilidade están nunha illa mental, están no seu propio mundo, non escoitan a poboación», condenó Presas, recordando ese sólido oasis al que había aludido antes la viceportavoz y secretaria xeral del PPdeG, Paula Prado.

La dirigente popular resaltó que los presupuestos aprobados hoy son los más elevados de la historia, dotados de 13.257 millones de euros, un 5 % más que el año pasado, y que fueron pensados para «a estabilidade, as persoas e o futuro». Defendió así que se refuerza el gasto en sanidad, educación y políticas sociales, sin recurrir a endeudamiento por primera vez 16 años, y valoró que entren en vigor el próximo 1 de enero, lo que según Prado demuestra que «Galicia non para», lema de precampaña del PP. Elevó a la comunidad como una «illa de estabilidade nun panorama nacional marcado polo bloqueo», aludiendo a un inicio del año en la política estatal con los presupuestos «sen iniciar sequera». 

«Aprobar os aprobarán, pero modificar os modificaremos nós», le corrigió el portavoz del PSdeG, Luis Álvarez, que lamentó que los populares descartasen apoyar cualquiera de sus enmiendas dirigidas a «correxir a problemática» de que Galicia sea hoy «unha comunidade autónoma menos dinámica e máis empobrecida». En una intervención anterior, la viceportavoz Begoña Rodríguez Rumbo apuntó a las cuentas como la muestra de un «fin de ciclo» del PP en la Xunta, después de catorce años gobernando «ininterrumpidamente» con políticas públicas que «non serviron para mellorar a vida dos galegos».

Pero para Alberto Pazos, portavoz popular, las cuentas son una prueba de la «estabilidade social, institucional e política que este Goberno tentou de maneira case compulsiva». «Tan só atoparán neste Orzamento un compromiso cunha Galicia mellor», expuso el diputado, que afeó a la oposición su «visión negra» de la realidad, que «ninguén comparte», y que les hace estar «máis sós que nunca».