Así han evolucionado las plazas mir en Galicia: se multiplican en familia y bajan en especialidades como otorrino y oftalmología

Elisa Álvarez González
Elisa Álvarez SANTIAGO / LA VOZ

GALICIA

Foto del último examen mir celebrado en Galicia, el pasado 20 de enero
Foto del último examen mir celebrado en Galicia, el pasado 20 de enero XOAN A. SOLER

En el año 1994 había 51 puestos para formar a médicos de medicina familiar y comunitaria y en la próxima convocatoria serán 207; oncología, psiquiatría o radiodiagnóstico son otras áreas reforzadas

20 jun 2024 . Actualizado a las 05:00 h.

Esta semana la Xunta dio a conocer su oferta de formación sanitaria especializada para el 2024-2025. Habrá 657 plazas de siete titulaciones, el mayor número de la historia. Son 19 vacantes más que en la convocatoria anterior, una tendencia al alza que se ha mantenido en los últimos años. Hace un decenio, por ejemplo, eran 376. Uno de los aumentos más evidentes está en la medicina familiar y comunitaria: 207 plazas, casi el triple que hace 20 años (79), y cuatro veces más que en 1994 (51). Hay 207 puestos, sí, pero eso no implica que se formen 207 especialistas porque en los últimos años han quedado plazas desiertas. Por ejemplo, 42 en este 2024.

No es la única especialidad en la que se necesitan y por lo tanto aumenta de forma considerable la oferta para los médicos. En un decenio psiquiatría ha pasado de 11 a 18, a las que hay que sumar dos de la nueva especialidad infantojuvenil. Oncología médica multiplicó su oferta de 4 a 10, radiodiagnóstico de 12 a 20, y pediatría de 20 a 27 (en el 2004 eran solo 13 vacantes).

Hay otras áreas, sin embargo, que se han mantenido estables en los últimos veinte o treinta años, con ligeras oscilaciones, o incluso forman ahora a menos profesionales que en convocatorias previas. Cirugía maxilofacial y cirugía plástica se mantienen estables, al igual que neurocirugía o cardiología. En oftalmología y en otorrinolaringología se forman menos especialistas en la actualidad. En otorrino eran siete hace diez años y ahora son seis, mientras que en oftalmología en el 2004 había once plazas mir, en el 2014 diez, y un decenio después nueve. En algunos casos la explicación a que no aumente el número de especialistas formados es evidente. Aunque el bum de las jubilaciones obliga a un recambio generacional, el descenso de la natalidad, por ejemplo, hace que no sean necesarios más obstetras. De ahí que mientras en el 2004 se ofertaron once plazas, en la convocatoria 2024-2025 serán diez. 

El bum de la enfermería

La formación sanitaria especializada incluye a los mires pero también a los residentes de Enfermería (EIR), Farmacia (FIR), Psicología (PIR), Química (QIR), Biología (BIR) y Física (RFIR). De las 657 plazas, 505 son de especialidades médicas. Pero si una titulación ha experimentado un bum esa es la enfermería con la creación de las distintas especialidades. Lejos quedan los tiempos en los que el único ámbito con formación específica era el obstétrico y ginecológico, las matronas. Ahora hay seis especialidades con 113 plazas: junto a la mencionada están enfermería familiar, del trabajo, de salud mental, pediátrica y geriátrica. En el 2014 se formaron 19 especialistas en el área familiar y comunitaria —para atención primaria— y el próximo año serán 53. En salud mental se ha triplicado la oferta en diez años (de 7 a 21), y en enfermería pediátrica pasó de 9 a 15. La especialidad de geriatría oferta 4 vacantes en la próxima convocatoria (no había ninguna hace diez años), mientras que en enfermería del trabajo no habrá oferta en el 2024-25.

Hay otra titulación cuyos especialistas son cada vez más necesarios: los psicólogos clínicos. En el 2004 había cuatro vacantes para formarse en toda Galicia, diez años más tarde eran 7 y en el 2024 serán 15.

Colegios y sindicatos médicos valoran el esfuerzo del plan para reforzar primaria pero piden mayor planificación

Simega, el sindicato médico de Galicia, asegura que el plan de la Xunta para reforzar la atención primaria este verano es el «mal menor», ya que siempre es mejor contar con un mayor número de facultativos para cubrir ausencias. No obstante, la organización sindical reclama al Sergas que en lo sucesivo actué con una mejor planificación, ya que el déficit de profesionales de los meses estivales se repite «desde hace 20 años». En concreto desde Simega detallan que en el área de Pontevedra trece de los catorce residentes de familia se han apuntado a este plan, y de ellos seis colaborarán en centros de salud, dos en PAC y los cinco restantes en las urgencias hospitalarias.

También el presidente del Consello Galego de Colexios Médicos, Eduardo Iglesias, valora este plan del Sergas para cubrir las vacantes de profesionales porque, explica, «hay que hacer lo posible para que todos los pacientes sean atendidos». No obstante echa en falta que este déficit de personal no se hubiese previsto «un poco antes».