Aceptan una demanda contra Paulina Rubio por no dar un concierto en Colombia

EFE

GENTE

El abogado de los demandantes envió en noviembre una carta a Rubio notificando que debía pagar en siete días 985.000 dólares (724.263 euros) por los costos del concierto.

17 feb 2011 . Actualizado a las 18:44 h.

Un juez de Florida ha aceptado la demanda civil interpuesta por casi un millón de dólares contra la cantante mexicana Paulina Rubio por presunto incumplimiento de contrato al no actuar en un concierto patrocinado por el Gobierno colombiano, informó hoy una fuente judicial.

El juez John Schelsinger aceptó la demanda presentada en noviembre pasado contra Rubio por CMG Entertainment Inc. de Miami, Fondo Mixto de Cultura de Boyaca de Colombia y la corporación cultural Viva la Música y dio 20 días de plazo a los abogados de Rubio para que presenten sus argumentos.

El abogado de los demandantes envió en noviembre una carta a Rubio notificando que debía pagar en siete días 985.000 dólares (724.263 euros) por los costos del concierto.

Según la acusación, la llamada «Chica de oro» de la música pop en español firmó un contrato con estas organizaciones en Miami para actuar en dos conciertos, uno en Bogotá el 28 de agosto pasado y otro en la vecina ciudad de Tunja (centro), el 31 de ese mismo mes.

Sin embargo, la artista no cumplió con el segundo concierto donde estaba «el Presidente de Colombia, el gobernador, numerosos funcionarios y los dignatarios de 23 países», según la reclamación presentada por el abogado Richard C. Wolfe, de la firma Ehrenstein Charbonneau Calderín, en un tribunal estatal de Miami.

«Logramos un contrato con ella que tenía que cumplir y no apareció. Teníamos a 30.000 personas esperando que ella apareciera y no lo hizo», dijo Wolfe a Efe en una entrevista telefónica.

El director de CMG Entertainment INC, Carlos Gutiérrez, comentó que se trataba de una ceremonia internacional y que «no se puede burlar de un presidente, ni de un de país, ni de un gobernador, de nadie».

Gutiérrez estuvo de acuerdo en pagar a la interprete de «Ni una sola palabra» 100.000 dólares (73.495 euros) por los dos conciertos, además de proporcionar el transporte desde Miami a Colombia, los hoteles y el traslado por tierra desde Bogotá a Tunja.

Luego mediante un convenio verbal fijaron un tercer concierto en Medellín (noroeste) para el 28 de agosto y la artista recibió un pago adicional de 60.000 dólares (44.000 euros).

La cantante dio los conciertos en Bogotá y Medellín, pero los problemas comenzaron, según el documento, cuando debió trasladarse a Tunja.

Rubio habría exigido trasladarse el mismo día y «sólo si los demandantes estaban de acuerdo en suministrarle un avión privado» para evitar cinco horas de automóvil.

CMG Entertainment INC fletó el avión y contrató a un piloto que esperó a Rubio durante «más de cinco horas», pero cuando la cantante llegó ya no podía volar a esa hora Tunja por restricciones sobre una parte del espacio aéreo.

Pese a ello, según el documento, Rubio «ofreció un soborno de 5.000 dólares» al piloto para que intentara volar y éste «aceptó», pero el avión fue localizado por radar y obligado a dirigirse a Bogotá.

La artista envió un mensaje de correo electrónico a Gutiérrez informando que «debido al clima no se le permitió aterrizar en Tunja».