Carlos Fitz-James Stuart asume la jefatura de la Casa de Alba, la estirpe principal de la nobleza de España y una de las familias aristocráticas más antiguas del país
21 nov 2014 . Actualizado a las 19:42 h.Carlos Fitz-James Stuart se sentó hoy en el centro de la primera fila en la catedral de Sevilla. A su derecha, el viudo de su madre, Alfonso Díez; a su izquierda, su hermana Cayetana, la menor de los seis hermanos. Emocionado, asumió el papel de cabeza de familia en el funeral de la duquesa.
Con la muerte de Cayetana Fitz-James Stuart, el primogénito, de 66 años, se convierte en el 19 duque de Alba, un título nobiliario que se remonta al siglo XV, al reinado de Enrique IV de Castilla.
Hijo de Cayetana Fitz-James Stuart y de su primer marido, Luis Martínez de Irujo, Carlos asume la jefatura de la Casa de Alba, la estirpe principal de la nobleza de España y una de las familias aristocráticas más antiguas del país. Su madre fue la tercera mujer que estuvo al frente de ella en sus más de 500 años de historia.
Junto al de duque de Alba, Carlos recibe los otros 44 títulos que tenía su madre al morir, tras haber cedido varios en vida a sus hijos. Catorce son títulos con Grandeza, máxima dignidad de la nobleza española en la jerarquía nobiliaria, justo después de la dignidad de infante, reservada a los hijos de los reyes.
«Carlos es conservador y protegerá el título», escribió de él la duquesa en su autobigrafía «Lo que la vida me ha enseñado» (2013).
El gran legado que recibe lleva aparejado el reto de preservar el patrimonio artístico e histórico forjado por su familia durante más de cinco siglos, así como el de darlo a conocer. Aunque quisiera, la mayor parte de las obras de arte no podría venderlas porque están protegidas.
Pasa a presidir la Fundación Casa de Alba, que tiene su sede en el madrileño Palacio de Liria, en el que nació la duquesa y en el que está la mayoría de los tesoros de la familia. La fundación reúne edificios históricos, fondos documentales y colecciones de arte, con cuadros de Goya, Tiziano, Rubens, Rembrandt y El Greco, entre otros artistas de importancia mundial.
En el reparto de la herencia que su madre hizo en vida le otorgó fincas rústicas, entre ellas uno de los mayores latifundios de la provincia de Córdoba. Ahora pasa también a tener el Palacio de Dueñas, en Sevilla, en el que su madre vivió sus últimos años y donde murió el miércoles por la noche. La residencia atesora también importantes cuadros de Sorolla, Madrazo y Giordano, entre otros.
Nacido en Madrid en 1948, hizo el bachillerato en el reputado colegio de Los Rosales, donde también estudió el rey Felipe VI y donde lo hacen ahora sus hijas. Se licenció en Derecho por la Universidad Complutense de Madrid.
Estuvo casado con Matilde Solís desde 1988 hasta el año 2000, cuando se divorciaron. Tuvieron dos hijos. El mayor, Fernando, es ahora el heredero del título. Tras su matrimonio mantuvo una relación con la acaudalada empresaria Alicia Koplowitz.
La prensa lo define como un hombre reservado y conciliador, al que le gusta cazar, navegar y esquiar, la música y la lectura.
Fue el padrino de su madre en las dos últimas bodas, las que siguieron al matrimonio de la duquesa con su padre, fallecido en 1972. Los que le conocen aseguran que tiene muy claro el papel que tiene que desempeñar ahora al frente de la Casa de Alba.