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La Justicia da la razón a los herederos de la «Duquesa Roja»

EFE

GENTE

Gabriel González, el hijo menor de la duquesa Roja.
Gabriel González, el hijo menor de la duquesa Roja. Victor Lopez | EFE

La Fundación Casa Medina Sidonia deberá devolver más de 33 millones de euros a los tres hijos y a la viuda

18 dic 2015 . Actualizado a las 16:56 h.

El juzgado mixto de Sanlúcar de Barrameda (Cádiz) ha condenado a la Fundación Casa Medina Sidonia a devolver más de 33 millones de euros a los tres hijos y la viuda de la Duquesa de Medina Sidonia, Luisa Isabel Álvarez de Toledo. La sentencia resuelve de este modo la demanda interpuesta por los tres hijos de la conocida como «Duquesa Roja» y les da la razón al considerar que ésta se excedió notablemente en las dotaciones con las que en 1990 constituyó la Fundación Casa Medina Sidonia.

Estos bienes están formados por el Palacio de los Guzmanes de Sanlúcar de Barrameda, sede de la Fundación, que incluye como su «joya» un archivo con más de seis millones de documentos (del siglo XII, el más antiguo) considerado como el más importante de Europa y como un referente para los historiadores, y catalogado como Bien de Interés Cultural por parte de la Junta de Andalucía.

El juez considera que los herederos tienen derecho a sus partes legítimas pero opta porque esta parte de los bienes, sobre los que la duquesa no podía disponer libremente, sea devuelta a los legítimos herederos en metálico en la suma de 33.538.272 euros.

La resolución del juez ha sido tomada «teniendo en cuenta que el Palacio y del Archivo Ducal son Bienes declarados de Interés Cultural, protegidos fuertemente por la normativa que los regula, que les confiere caracteres de integridad e indivisibilidad, y también ante los serios inconvenientes que la cotitularidad en estos bienes por los demandantes supondría en el gobierno de los mismos», explica el Tribunal Superior de Justicia de Andalucía.

La decisión judicial permite a la Fundación seguir siendo titular del Conjunto Ducal Medina Sidonia, pero la convierte en deudora de los hijos y viuda, a los que habrá de abonar en diferentes proporciones para resarcirlos de la lesión sufrida en su derechos sucesorios.

Estos derechos incluyen a Liliane Dhalman, viuda de la Duquesa Roja, con la que convivió 25 años y con la que se casó poco antes de su muerte, en el 2008, cuando fue designada presidenta vitalicia de la institución por deseo de la aristócrata. El usufructo viudal fijado por el juez para ella, que no se sumó a las demandas de los hijos de su pareja, es fijado en una cuantía superior a los seis millones de euros. En su sentencia, el magistrado considera que los bienes con los que una persona dota una fundación están limitados por las normas que regulan las legítimas de los hijos del derecho civil, que impiden donar en vida más del tercio de lo que una persona tiene o pudo tener al momento de su fallecimiento si no se hubiera desprendido gratuitamente de parte de sus bienes por encima de ese límite. Así el juez estima parcialmente las peticiones de los tres hijos de la Duquesa, Leoncio Alonso González de Gregorio y Álvarez de Toledo, actual duque de Medina Sidonia, y sus hermanos menores, Pilar y Gabriel.

Las administraciones, abocadas a negociar con los herederos

El patronato de la Fundación Medina Sidonia se reunirá el próximo lunes para analizar la sentencia, que da la razón a los tres hijos de la Duquesa Roja y entiende que ésta se excedió al donar a la Fundación que constituyó en 1990 más bienes de los que podía, porque parte de ellos formaban parte del caudal hereditario de sus hijos y de su viuda.

Ante el nivel de protección cultural del patrimonio, declarado Bien de Interés Cultural, su «indivisibilidad» y «los serios inconvenientes» que plantearía su cotitularidad, el juez ha resuelto que la Fundación pague 33 millones de euros a los herederos (16 millones al hijo mayor, actual duque de Media Sidonia, 5 a los dos menores y 6 a su viuda). El patronato, del que forman parte el Ministerio de Cultura, la Consejería de Cultura de la Junta de Andalucía, la Diputación Provincial de Cádiz, el Ayuntamiento de Sanlúcar de Barrameda, la viuda de la Duquesa Roja y presidenta de la Fundación, Liliane Dhalman, y el catedrático de historia Laureano Rodríguez Liáñez, decidirá, casi con toda probabilidad, recurrir esta sentencia ante la Audiencia Provincial de Cádiz, según fuentes próximas a este organismo.

Pero, al margen de este recurso, la solución al complejo conflicto jurídico abre la vía a que, dado que la fundación no tiene liquidez para hacer frente a este pago, las administraciones abran una negociación con los herederos y sellen así la «vocación pública» de estos bienes que han esgrimido como argumento frente a las reclamaciones de los herederos durante el juicio, según abogados de las dos partes implicadas. «Esto acabará en una negociación con la Junta de Andalucía», ha subrayado a Efe Javier Timermans de Palma, abogado especialista en derecho nobiliario y defensor de Gabriel González de Gregorio y Álvarez de Toledo, el hijo menor de la Duquesa Roja.

Este abogado, al igual que el de Leoncio Alonso González de Gregorio y Álvarez de Toledo, actual duque de Medina Sidonia, ha mostrado a Efe su satisfacción con el hecho de que la sentencia haya reconocido los derechos hereditarios de los tres hijos de la Duquesa Roja, que, en su opinión, habían sufrido «una especie de expropiación forzosa por la vía de los hechos», en palabras de Eduardo Ferreiro, defensor del hijo mayor de la Duquesa Roja.

Estos bienes están formados por el Palacio de los Guzmanes de Sanlúcar de Barrameda, sede de la Fundación, que incluye como su principal «joya» un archivo con más de seis millones de documentos (el más antiguo del siglo XII) considerado como el más importante de Europa y como un referente para los historiadores. A su regreso a España tras su exilio en el franquismo, la Duquesa Roja «dio su vida al archivo», lo llevó en un camión desde Madrid hasta Sanlúcar de Barrameda e hizo «un trabajo de chinos» para poner en orden manualmente estos legajos, a los que quiso dar un carácter público constituyendo esta Fundación, según declaró en el juicio la albacea de su testamento y amiga suya Urquiola de Palacio.

La sentencia satisface los deseos de la duquesa, y de los usuarios de este importante archivo, en el sentido de que este legado sea indivisible y permanezca en su espacio natural, el Palacio Ducal de Sanlúcar de Barrameda, algo que, según insistieron en asegurar durante el juicio, los hijos nunca intentaron cambiar. 

Fundación Medina Sidonia actuará en favor del patrimonio andaluz

La consejera de Cultura, Rosa Aguilar, ha anunciado que las instituciones que integran la Fundación Medina Sidonia, se reunirán el lunes para «tomar las decisiones más adecuadas en su competencia de tutela y protección del patrimonio».

En declaraciones a los periodistas antes de visitar el conjunto arqueológico de Medina Azahara, Aguilar ha manifestado su «respeto a las decisiones judiciales» y su cautela ante la posibilidad de plantear un recurso contra el fallo que condena a la Fundación Medina Sidonia a la devolución de 33 millones de euros a los herederos.

La consejera ha emplazado al próximo lunes cuando las instituciones que forman parte de la Fundación, «con toda probabilidad», vayan a reunirse para que los técnicos correspondientes realicen un «estudio jurídico pormenorizado» de la sentencia y «poder tomar las decisiones que se consideren más adecuadas». Aguilar ha recordado que la Junta está en ese procedimiento que se ha llevado a cabo en el ámbito judicial «al tener las competencias de tutela y protección del patrimonio documental e histórico del que se compone la Fundación, como el Palacio de los Guzmanes de Sanlúcar de Barrameda, que incluye un archivo con más de seis millones de documentos desde el siglo XII y catalogado como Bien de Interés Cultural por parte de la Junta de Andalucía.