Ataviado con un llamativo look en tonos rosas y con unas gafas de sol brillantes intentó hacerse notar en público, pero ninguna persona se acercó a la estrella del pop, al que le llamó la atención semejante tranquilidad: «Nada es como en los 90»
23 jul 2024 . Actualizado a las 17:12 h.Pertenecer a una boy band mítica de los 90 como fue Take That, ser autor de algunas de las canciones pop más conocidas del presente siglo como Angels, Rock DJ o You Know Me y protagonizar multitudinarias giras de conciertos por todo el mundo para que, al final, nadie te reconozca en 2024. Esa es la realidad a la que ha tenido que enfrentarse el cantante de pop rock británico Robbie Williams. A sus 50 años, decidía este mes, tras salir a comer a un restaurante, regresar a su casa en Londres paseando por Hyde Park, uno de los parques más conocidos de la ciudad, transitado a diario por miles de vecinos y turistas. Sin embargo, lo que él pensaba que iba a ser darse, como suele decirse, un baño de masas, resultó totalmente lo contario. Williams grabó un vídeo en el que, pese a su llamativa vestimenta en tonos rosas, nadie repara en él.
El momento fue compartido en su perfil de Instagram con sus seguidores. El artista, que ha vendido la friolera de 75 millones de discos de sus trabajos en solitario, se muestra sorprendido de que nadie se diera cuenta de quien es. «Absolutamente nadie me reconoció ni me molestó. Y realmente necesito que lo hagan», reclama un Robbie Williams que demanda algo de cariño por parte de algún fan. «Nada era así en los 90», sentencia.
En un momento dado se despoja incluso de su chaqueta, se queda en camiseta de tirantes y mientras disfruta de una soleada jornada saluda él mismo a la gente tumbado en el césped. Ni siquiera así hay reacción alguna entre los transeúntes que, de hecho, intentan evitarle por su llamativo comportamiento.
Finalmente, sí que publicará un vídeo sacándose un selfie con una seguidora francesa, Alison, mostrándose encantado de poder saludarla. «Back in the game (de vuelta en el juego)», dice tras despedirse de ella a la cámara.
Pese a todo, Williams sí acabó rodeándose de gente en Hyde Park. El 6 de julio ofreció un multitudinario concierto, en el que repasó los temas de toda su trayectoria y de discos como Sing When You're Winning (2000), Escapology (2002) o Rudebox (2006) al igual que hizo hace un año en el Monte do Gozo de Santiago de Compostela, encabezando un festival que contó también con la presencia de Hombres G e Iván Ferreiro.