El hijo de Mette-Marit pone a la corona noruega contra las cuerdas

Joaquina Dueñas MADRID / COLPISA

GENTE

LISE ASERUD

Marius Borg habla de un pacto de silencio con la prensa en unos comprometidos audios

23 sep 2024 . Actualizado a las 15:30 h.

Suma y sigue. Los problemas de Marius Borg, hijo de la princesa Mette-Marit, no cesan y, cada día más, están poniendo contra las cuerdas a la corona noruega. El joven era detenido por primera vez el pasado 4 de agosto acusado de lesiones a su novia, algo que reconocía a través de un comunicado en el que aducía consumo de alcohol y drogas además de trastornos mentales. Ya entonces, la reacción de Haakon Magnus y de su mujer estuvo en el punto de mira. La prensa reprochó al príncipe heredero su silencio, que solo rompió para calificar el incidente de asunto «grave».

Sin embargo, las últimas novedades no han hecho más que agravar la situación ya que han salido a la luz unos audios que salpican directamente a la familia real noruega. El periódico Se og Hør ha publicado una conversación de Marius con dos detectives de policía en los que los agentes piden al hijo de Mette-Marit que deje el tráfico de drogas. El joven, lejos de amedrentarse por la advertencia, asegura que no le preocupa y pone sobre la mesa un presunto pacto de silencio entre la prensa y la casa real por el que los medios de comunicación tendrían prohibido publicar este tipo de asuntos. «No se les permite escribir sobre esto. Es un acuerdo. No hay nada más sobre lo que pensar y no estoy preocupado por eso», expresa. Y, por si fuera poco, reconoce que tanto su madre como el resto de la familia son conocedores de la situación: «Así son las cosas. Mis padres lo saben, mis amigos también, no puedo hacer nada al respecto».

La semana pasada trascendía también la detención de un sicario contratado para asesinar a la exnovia de Marius Borg. Un hombre de 26 años que fue arrestado después de acercarse sospechosamente a la víctima y que formaba parte de un complot que se descubrió gracias a un correo electrónico enviado desde la cuenta del acusado. De momento, las autoridades noruegas siguen trabajando para esclarecer quien está detrás de este intento de asesinato que ha provocado que la exnovia del hijo de Mette-Marit haya tenido que abandonar el país por su seguridad.

A pesar de la gravedad de todos estos hechos, el abogado de Marius Borg ha hecho unas declaraciones con las que solo ha conseguido avivar la polémica al asegurar que el joven «está siendo sometido a una discriminación inversa. La policía es más estricta con él que con otros porque es el hijo de la princesa heredera. Es sorprendente. Se trata de un mal uso de los recursos policiales».

Mientras tanto, la discreción y el silencio de la familia real los ha colocado en el punto de mira. El propio Haakon ha reconocido que «puede tener un impacto en la confianza de los noruegos en la Casa Real». De hecho, un informe publicado por el diario Dagbladet el pasado mes de agosto, revelaba que casi tres de cada cuatro noruego no quieren que el rey Harald abdique en favor de su hijo, a pesar del delicado estado de salud del monarca a sus 87 años que le ha llevado a recurrentes ingresos hospitalarios.