Ausencia de los reyes de España en el enlace, al que asisten la reina Sofía, las infantas Elena y Cristina y algunos de sus hijos
28 sep 2024 . Actualizado a las 18:23 h.La familia real griega está de boda este sábado. La capital, Atenas, acoge el enlace de Teodora, la hija menor del fallecido rey Constantino y la reina Ana María, con el abogado estadounidense de origen indio Matthew Kumar. Después de haber pospuesto la boda hasta en tres ocasiones, los novios han llegado esta tarde a la Catedral Metropolitana de Atenas para convertirse, por fin en marido y mujer. La boda era muy esperada en la familia, ya que es la primera gran fiesta tras la muerte de Constantino, en enero del 2023.
Teodora llegó del brazo de su hermano mayor, Pablo de Grecia, que ahora ejerce simbólicamente de jefe de la depuesta familia real griega. Lleva para este día un regio vestido de una diseñadora griega, un velo que han lucido varias reinas y princesas y una tiara de diamantes de origen egipcio que también ha protagonizado varias bodas reales.
La catedral elegida para el enlace es la misma que fue el escenario de la boda del rey Juan Carlos y la reina Sofía en el año 1962. Pero el rey Juan Carlos, que se encuentra en Sanxenxo, no está presente en la celebración de la familia de su mujer. Tampoco asisten los reyes Felipe y Letizia, que en la noche del viernes cenaron en Combarro después de protagonizar un breve encuentro familiar con el rey emérito y su hija Leonor en la Escuela Naval de Marín.
Mientras esa reunión se producía en Pontevedra en la noche del viernes, la otra parte de la familia del rey asistía en el Museo Bizantino y Cristiano de Atenas a una fiesta de preboda de ensueño.
Este sábado, la reina Sofía ha llegado muy sonriente y bien acompañada a la catedral de Atenas para la boda de su sobrina. Con ella iban sus hijas, las infantas Elena y Cristina, y tres de sus nietos, Irene, Juan Valentín y Miguel Urdangarin.
La reina emérita ha elegido un atuendo radiante, con un vestido largo de su diseñador de cabecera, Alejandro de Miguel, en un llamativo color fucsia. En la parte superior predomina un escote adaptado y a medida, manga francesa y un detalle en forma de nudo en la parte abdominal que remata en una larga falda plisada.
La infanta Elena, fiel a su estilo, ha lucido un vestido con estampado de lunares en color azul y entallado en la cintura, mientras que Cristina ha elegido un vestido satinado azul cielo con fruncido en la cintura.
Lo que más ha llamado la atención ha sido la transformación de la joven Irene Urdangarin en la versión más elegante y arreglada que ha lucido hasta ahora. Lleva un vestido con doble tejido: por un lado, un estampado floral en terciopelo y, de fondo, un azul oscuro en raso. La hija de Iñaki Urdangarin se ha puesto un chal para preservar la parte superior en su entrada a la iglesia.