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Meghan Markle: «Les escribo a mis hijos un mail todas las noches antes de acostarme para que los lean cuando sean mayores»

P. V. LA VOZ

GENTE

Meghan Markle
Meghan Markle YOUTUBE: @jamiekernlimaofficial

La esposa del príncipe Enrique ha dado su primera entrevista a un pódcast, donde se ha visto envuelta en la polémica por el uso de su título de Alteza, a pesar de que abandonaron la Familia Real en el 2020

30 abr 2025 . Actualizado a las 15:35 h.

Meghan Markle, esposa del príncipe Enrique, ha dado su primera entrevista en un pódcast. Fue en el de su amiga Jamie Kern Lima, donde ambas charlaron, por voluntad expresa, sin gota alguna de maquillaje. «Decidimos hacerlo de la misma forma en la que pasamos nuestro tiempo juntas: sin maquillaje, en chándal y acurrucadas en la mecedora», escribió en una publicación la conductora de The Jamie Kern Lima Show Podcast.

Inmersa en el lanzamiento de su marca As Ever, Meghan tuvo tiempo para dialogar sobre su estilo de vida, sus rutinas y se emocionó especialmente al hablar sobre sus hijos, Archie, de 5 años, y Lilibet, de 3. La presentadora le tenía una sorpresa preparada: una carta escrita por sus vástagos y su esposo. «Amamos tu comida, tus tortitas y amamos muchísimo tus abrazos. ¡Y te amamos a ti!», leyó una emocionada Meghan.

Eso le dio pie a contar una curiosa costumbre que tiene para dejarles un legado de amor a sus hijos de cara al futuro. «Casi cada noche, antes de irme a la cama, les mando un email a mis hijos en unas direcciones de correo electrónico secretas», confesó Markle. La idea no es suya. Una amiga íntima la inició en este método de comunicación con sus hijos. 

Primero, creó esos correos secretos, «con nombres que nadie sacaría nunca», y que solo les revelará cuando ella estime oportuno, «quizás cuando tengan 16 o 18 años». Las bandejas de entrada, cuando llegue el momento, estarán repletas de miles de mensajes y fotografías que su madre les ha estado enviando casi a diario. De haberlo hecho sin saltarse un solo día, al cumplir 16 tendrían la friolera de 5.840 correos.

«No tiene ni siquiera que ser nada importante», comenta Markle sobre el contenido de esos correos. Son pequeños detalles del día a día. Una frase divertida que alguno de sus hijos ha dicho, una fotografía de esas «que seguramente no enmarcarías» —instantáneas desayunando o jugando con los perros— o cualquier detalle cotidiano que les permita, como una particular «cápsula del tiempo», ver los sentimientos que su madre tenía hacia ellos en cada momento.

«Cada uno de esos momentos en los que quise decirte cuánto te quería y lo orgullosa que estoy de ti», define, visiblemente conmovida, como objetivo de sus misivas electrónicas, «quiero hacerlo para que puedan echar la vista atrás y decir: "¡Oh, dios mío, nuestra madre nos quiso tantísimo!"».

Meghan no pudo evitar que se le cayesen las lágrimas al pensar en el momento en el que les dé acceso a sus hijos al contenido de toda esa inmensa bandeja de entrada. «Les diré: "Aquí están todos estos emails que he estado conservando para vosotros durante toda vuestra vida, aquí está todo"», expresa.

Polémica por el uso de su título real

El pódcast también ha sido noticia por el tratamiento de alteza real que se ha visto durante la emisión. Desde enero del 2020, con su salida de la Familia Real británica, se estableció que Harry y Meghan no podían volver a ser tratados como tal al no ser miembros activos de la realeza. Seguirían teniendo sus títulos de manera honorífica, pero el compromiso expreso al que habían llegado con la difunta Isabel II era que, de ahí en adelante, nunca más usarían los títulos de manera activa.

En el pódcast, en cambio, la presentadora reveló la cesta que había recibido de Meghan, con una salsa de fresa casera, helado y unas flores, así como una tarjeta firmada así: «Saludos de Su Alteza Real la duquesa de Sussex».

Un portavoz de la pareja no tardó en salir a aclararlo, diciendo que la pareja ya no usa el tratamiento, y que no se ha utilizado con fines comerciales. Con todo, ha recordado que, aunque no se usen públicamente, sus títulos permanecen.