El toledano eleva a 28 años la media de edad del once del Celta, con cinco jugadores por encima de la treintena en el equipo, que jugó ante el Dépor
22 mar 2013 . Actualizado a las 15:10 h.Abel Resino tira de veteranía desde su desembarco en el Celta. En sus cuatro alineaciones ha ido incrementado la media de edad de un modo paulatino hasta situarla en los 28 años en el derbi de Riazor. El caso más llamativo con respecto a la época de Paco Herrera lo representa Quique de Lucas, que a sus 34 años acumula dos partidos consecutivos como titular.
El Celta del ascenso tenía una media de 27 años. El simple cambio en la portería, con la entrada de Javi Varas por Sergio o Yoel, más la irrupción de Cabral por mor de la salida de Oier Sanjurjo, elevó la media de edad celeste en el arranque en Primera División hasta los 27,2 años, ratio que se ha venido manteniendo casi inalterable a lo largo de toda la era Herrera en la máxima categoría.
Con la llegada de Abel Resino, el equipo ha ido subiendo su media de edad jornada a jornada. Comenzó con uno de los onces más jóvenes del curso ante el Granada (26,4) pero un mes después la cota alcanzó los 28 años en Riazor con cinco jugadores por encima de la treintena (Varas, Oubiña, Pranjic, De Lucas y Bermejo).
Porque de un modo paulatino Abel ha ido dando entrada a los más veteranos del plantel. En algún caso por necesidad, como el caso de Pranjic por Álex López en el centro del campo, pero en otros como clara apuesta personal. Con De Lucas a la cabeza.
El catalán apenas contaba para Paco Herrera. Después de dos años siendo un jugador muy importante para el Celta su protagonismo había ido menguando de un modo considerable. Si con el extremeño fue titular en cuatro partidos en 24 jornadas con el toledano ya acumula dos de cuatro posibles y en los dos encuentros restantes ha tenido minutos desde el banquillo. Sin embargo, no ha conseguido marcar, algo que hizo con el anterior técnico.
La apuesta por De Lucas acarrea su ubicación en la banda izquierda, algo inédito en Vigo. Su nuevo técnico considera que puede ser un jugador desequilibrante pegado a la línea de cal y que debe aportar su experiencia.
De los veteranos el único que ha perdido protagonismo ha sido Krohn-Dehli, cuyo bajón de forma coincidió con el desembarco de Abel, que ya le ha hecho pasar por el banquillo en las dos últimas salidas.