Juan José García Cota: «En el Celta todos sumamos más allá de nuestro puesto»

El doctor Juan José García Cota, responsable de los servicios médicos del Celta, hace balance positivo de un año que, también en su área, ha sido duro para el club. Se define como «un celtista más» y, tras siete cursos en Vigo, se siente «privilegiado» de poder compaginar el equipo y la selección española.

-¿Cuál es el balance del año del Celta en el plano médico?

-Muy bueno en cuanto a que hemos tenido pocas lesiones, pero ha habido una frecuencia muy alta de graves. Salvando esas, las habituales (musculares, etc.) han sido bajas y los tiempos de recuperación, correctos.

-Habrá sido duro el hecho de llegar a tener a tres jugadores con lesiones de larga duración.

-Sí, sobre todo con las dos rodillas de Samuel, que nos trajeron de cabeza. Una rotura de cruzado entra dentro de lo normal, pero con cuatro en un período corto, buscas causas para actuar sobre ello. Pedí ayuda a compañeros para que valoraran cada situación y no obcecarme, pero no se halló nexo de unión.

-¿Qué tal esta temporada con el nuevo cuerpo técnico?

-Tengo mucha suerte. Con Luis Enrique y su gente me pasa lo mismo que con el resto de entrenadores: desde el primer día me dejan claro que el servicio del que soy responsable lo llevo yo, que lo que yo diga en cuanto a que un jugador pueda o no jugar, lo van a cumplir. Son incluso más cautos que yo, y eso beneficia el tratamiento de las lesiones.

-¿Cómo se vive el trabajo en la selección en comparación con el que realiza en el Celta?

-Es una forma diferente de trabajar: a diario todo el año frente a algo puntual. Más allá de eso, se vive de modo similar. Para mí fue tan emocionante ganar un Mundial como el ascenso del Celta, es el entorno mediático y de aficionados lo que modifica todo. Con la selección no puedes salir del hotel; estás con el Celta y sí puedes dar un paseo. Ambos me dan alegrías diarias que están por encima de los resultados.

-¿Se da a los servicios médicos la importancia que tienen?

-Viví épocas en que éramos una figura testimonial que había que tener por ley y, si no, no estaría. Empieza a valorarse porque se dan cuenta de que es importante en el organigrama de un club, que aporta para que los resultados deportivos sean mejores.

-Ha sido jugador, presidente y médico. ¿Con qué se queda?

-Con lo actual estoy encantado y disfruto día a día, pero cada vez echo más de menos mi época de futbolista. Al llegar a cualquier campo, me entra una gran nostalgia y daría lo que fuera por vestirme de corto allí.

-En el Celta llegó incluso a preparar vídeos motivacionales. ¿Continúa haciéndolo?

-No, más que nada porque soy un poco torpe con los montajes y me llevaba tiempo, que es de lo que más carezco. Pero no descarto retomarlo.

-Era una muestra de que su papel en el club traspasa la faceta de médico, ¿no?

-Claro. Dentro del club hay una palabra que se repite, y es «sumar». Eso supone ir más allá de las tareas de tu puesto: hablar con un jugador que está bajo de ánimo, ir a tomar algo con él... Todos sumamos y tiene que ser así. Creo que el Celta conserva ese rescoldo de romanticismo, de ser como un gran familia. Y eso es lo que nos va a hacer salir adelante en cualquier situación.

---

---

---