Calma tensa entre la afición céltica

Míriam Vázquez Fraga VIGO / LA VOZ

GRADA DE RÍO

XOAN CARLOS GIL

El celtismo confía en que se logrará la salvación, pero advierte de que urge atarla cuanto antes

10 abr 2014 . Actualizado a las 17:27 h.

Al Celta le falta «matar la permanencia» y el objetivo, cercano por momentos, parece resistirse. Lo dice Cé Rodríguez, de Lío en Río, y lo comparten los representantes de otras peñas consultados por La Voz, que hablan de un celtismo que confía plenamente en la salvación, pero que se muestra reacio a lanzar las campanas al vuelo.

«Después de lo vivido el año pasado, estamos en una situación privilegiada que todos hubiéramos firmado en agosto. Pero hay que puntuar ya para evitar dudas», avisa Pablo Alonso, de Irmandiños 1923. También Fernando Juncal, de Morriña Celeste, cree que ganar a la Real el sábado sería clave: «Quedaría la salvación finiquitada, mientras que si encadenamos dos derrotas podría aparecer el nerviosismo».

Hacer los deberes cuanto antes

Cifran la ansiada permanencia en torno a los 40 puntos y no ocultan que «habería que facelo moi mal para non conseguilo», en palabras de Miguel Lago, de Merlegos Celestes. Consideran fundamental solventarlo cuanto antes. «Las dos últimas jornadas, contra Real Madrid y Valencia, son muy complicadas y hay que llegar ahí con los deberes ya hechos», pide Irene Rial, de la Peña Afouteza. A esta idea se suma Marta Saiz, de Lechuzas Celestes: «Queremos disfrutar esos dos partidos como un equipo de Primera, sabiendo que lo vamos a seguir siendo. Hasta que sea matemático, no nos relajaremos».

De la misma opinión es Bele Dios, de Carcamáns. «O Celta é unha caixa de sorpresas, o mesmo fai bo fútbol que aburre. Pero se se gaña á Real, teremos pé e medio en Primeira».

Saben que se han perdido oportunidades clave, como la del pasado fin de semana ante el Rayo, y lo atribuyen a diferentes motivos. «Han sufrido una especie de miedo escénico ante los rivales directos. En ocasiones somos expertos en resucitar a los muertos», constata Tomás Rodríguez, de Preferencia Celeste. Otros, como Iván Fernández, de Blau Cel, han llegado a ver «falta de actitud». Más factores que mencionan son «el escaso acierto de cara a gol» y el tener «una plantilla coja».

Pese a la «irregularidad» que señalan, le dan buena nota a un equipo que «es capaz de plantear partidos diferentes según el rival, cuando el año pasado hacía siempre lo mismo y estaba a expensas de que el otro fuera o no capaz de pararle», valora Cé.

Ese mérito se lo reconocen a un Luis Enrique «que hacía cosas que en un momento dado parecía no encajaban, pero que se ha ido viendo que tenían sentido», desde el punto de vista de Marta. Tomás añade que el técnico «ha hecho del Celta un equipo con mentalidad ganadora», si bien Pablo Alonso matiza que no siempre es así, pues «a veces no sabes con qué versión te vas a encontrar» en cada compromiso.

Los más críticos con el asturiano, como Rial, recuerdan que «no es lógico que un jugador pase de titular a no convocado en una semana», y varios le reprochan partidos como el de Getafe. «Estuve allí y al ver la alineación tuve ganas de volverme», recuerda Iván, en la misma línea que Miguel, para quien «foi un partido tirado, e non o único».

Incondicionales y ansiosos

Sobre el planteamiento de la temporada, ven luces y sombras. La apuesta por la cantera y los fichajes llegados de la mano de Luis Enrique son lo más celebrado. En el lado opuesto, un nombre propio que también tiene sus defensores. «Nosotros confiamos en que Welliton debute en Balaídos con gol y lo dedique a Lío en Río», bromea Cé.

El recurrido «somos el Celta y nos queda por sufrir» de Iván lo comparten la mayoría. Como están convencidos de que la afición va a seguir ahí «para lo que haga falta», según Fernando. Miguel Lago lo tiene claro: «Hai algo de incertidume porque falta saber cando, pero sabemos que se vai conseguir».

En Carcamáns, que cumple 15 años el próximo 26 de abril, están convencidos de «poder celebrar o aniversario e a permanencia a un tempo».