El Celta, con un buen puñado de canteranos, visita al Athletic con la eliminatoria casi imposible
14 ene 2015 . Actualizado a las 18:04 h.Solo la épica puede arreglar esta noche (20 horas, Canal+ Multideporte y GolT) el 2-4 con el que Celta y Athletic cerraron el partido de ida de los octavos de la Copa del Rey de Balaídos. Dar la vuelta a la eliminatoria para un equipo que todavía está recuperándose de la sequía goleadora, parece casi un milagro, por lo que la visita a San Mamés se presenta como una buena oportunidad para que los célticos enmienden la imagen dada ante los de Valverde la semana pasada y de paso prueben algunas cosas que aprovechar luego en la Liga, la competición en la que tienen centradas sus intenciones.
Aunque Eduardo Berizzo se aferraba ayer a la idea de que en fútbol nada está escrito y que la prioridad de su equipo es competir al máximo nivel, tanto célticos como vizcaínos son conscientes de que el Athletic tiene pie y medio en cuartos de final. De ahí que Ernesto Valverde vaya a dar un giro a su once y a conceder minutos a los menos habituales. Ese planteamiento también puede seguirse en un Celta que ha viajado cargado de chavales de la cantera y que encarará el choque en San Mamés mirando de reojo al partido del sábado ante el Espanyol.
Aunque la situación de ambos equipos está clara, lo que parece descartado es que vayan a salir sin tensión al partido. Para los célticos el choque puede servir para enmendar la imagen del encuentro de ida y para que algún jugador se reivindique, y los vascos necesitan demostrar su competitividad después del duro revés de la derrota ante el colista del fin de semana pasado. Los bilbaínos tienen solo tres puntos de margen sobre el descenso y eso está generando nerviosismo en un equipo habituado a moverse por zonas más cálidas de la clasificación liguera, pero que tiene en la Copa su torneo favorito.
De entrada, de los 23 jugadores que Berizzo se ha llevado para los partidos de Bilbao y Barcelona, esta noche serán baja Larrivey, todavía sancionado, y David Costas, expulsado en el último partido de Copa. Carles Planas, que se está recuperando de sus molestias, esperará al choque con el Espanyol para reaparecer, y es muy posible que el Toto, que retomará el 4-3-3 tradicional, reserve a los más habituales. Esta será la primera oportunidad para ver sobre el césped al belga Théo Bongonda y la ocasión perfecta para ver en acción a más canteranos.
Un once de habituales y suplentes
Eduardo Berizzo avanzó en su comparecencia previa a la visita a Bilbao que hoy armará un equipo con bastantes cambios, pero que respetará a la vez el protagonismo de los más habituales. Las bajas de Hugo Mallo y Planas abren la puerta a la titularidad de Samu Araújo en el lateral zurdo, dejando a Jonny por la derecha, aunque tampoco está descartado que el técnico prefiera cambiar de ubicación a alguno de sus habituales, como ya hizo con Radoja o Sergi. El catalán, de entrada, parece destinado al centro de la defensa, donde puede volver Cabral, que no jugó ante el Valencia por sanción.
Siguiendo el esquema habitual de tres centrocampistas, Borja Iglesias puede tomar el relevo de Radoja con Álex López y Augusto Fernández ocupándose de las bandas. Charles, que no podrá jugar en Barcelona por sanción, se presenta como la referencia ofensiva en un tridente en el que Santi Mina tiene todas las papeletas para entrar como ocupante del flanco diestro. En el margen zurdo del ataque Berizzo confirmó que Théo Bongondá tendrá sus primeros minutos como céltico. El belga puede ser la apuesta para la zona zurda si el preparador prefiere no forzar a Nolito, recién recuperado de sus molestias.