El Toto habla de una falta de respeto inaceptable y el club, que busca sustituto, cierra filas con su técnico
18 ene 2017 . Actualizado a las 09:22 h.Los días de Fabián Orellana en el Celta parecen contados. Berizzo decidió apartarle por lo que considera una falta de respecto inaceptable y dejó claro que no contará con él mientras sea entrenador del conjunto vigués. El Celta, por boca de su director deportivo, cerró filas con el entrenador y anunció que su intención es venderlo en este mercado invernal (el Udinese se llevaría el 40 % del montante). El chileno, que le costó al Celta 1,2 millones de euros en el mercado invernal del año 2013 procedente del Granada, tiene contrato en vigor hasta junio del 2019 y una cláusula de rescisión de 15 millones. El primer equipo que ha aparecido en el horizonte es el Valencia, que en el verano del 2015 ya había intentado su contratación. Mientras, el jugador continúa ejercitándose al margen y ayer abandonó A Madroa sonriente y haciendo el signo de la victoria.
«He decidido apartar a Orellana del equipo, la decisión está basada en una falta de respeto inaceptable, mi posición se la he transmitido al club y consensuadamente decidimos apartarlo del equipo. Conmigo no pertenece al equipo más», comentó Eduardo Berizzo en su comparecencia de prensa previa al encuentro con el Real Madrid, indicando que para él «lo personal y lo profesional van íntimamente relacionados. No podría diferenciarlos y no lo hice». En este caso en nada influye que Orellana sea uno de los jugadores con más talento y que su rendimiento en Vigo hasta esta temporada haya sido muy bueno.
Antes de dar a conocer su decisión final, el Toto reunió a su plantilla. «Les he explicado al equipo cuál era mi decisión y los motivos por los cuales la tomaba y así lo han entendido».
Unos motivos que oficialmente no han trascendido, aunque todo apunta a que la relación entre ambos era tirante desde hace tiempo y que pudo tener su primer punto de fricción serio durante el parón navideño, ya que el Toto no accedió a ampliar el permiso del jugador, que quería más margen por estar lesionado. La semana pasada entrenó con normalidad y no entró en la convocatoria para ninguno de los dos partidos, aspecto que pudo ser el detonante para el incidente (una discusión muy subida de tono) que ha provocado la decisión final. Hay que tener en cuenta que el chileno estuvo trabajando con el grupo toda la semana.
Conocido el informe, el Celta ha cerrado filas con su entrenador. «El club ha decidido de forma consensuada buscarle una salida al jugador en este mercado de enero. Buscaremos lo que sea más interesante y mejor para el club, consideramos que vamos a tratar de conseguir una venta», comentó Felipe Miñambres, que también explicó que «vamos a hacer lo que sea mejor para el club. Ante una falta de respeto tenemos que tomar decisiones, en el ámbito del club no entra si se ha pedido perdón o no. Pensamos que la decisión que ha tomado el míster es la correcta». Berizzo matizó que el chileno no se había disculpado «pero tampoco hacía falta».
Esta es la segunda vez en la trayectoria del técnico celeste que prescinde de un jugador. El precedente se dio en su época de O’Higgins con Fernando de la Fuente, que había protagonizado un incidente después de ser sustituido en un entrenamiento.
Si se confirma la salida de Orellana, al Celta se le dibujaría un nuevo escenario de mercado ya que quedaría libre una plaza de extracomunitario porque el chileno, que lleva siete años en España, todavía no ha conseguido la doble nacionalidad. Miñambres confirmó el deseo de fichar un reemplazante.
Pese a ocupar plaza de extranjero, el Valencia parece interesado en hacerse con sus servicios. Contratar a Orellana era una vieja aspiración del club ché que ahora se pone a tiro, tanto a nivel económico como deportivo.