Sin Aspas para la última bala europea

GRADA DE RÍO

Óscar Vázquez

Sufre una rotura fibrilar de grado I y causará baja alrededor de tres semanas; no estaría para el derbi

19 abr 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

El Celta deberá aprender a vivir sin Iago Aspas durante las próximas tres semanas. Ese es el tiempo que los servicios médicos del club estiman necesario para que el futbolista se recupere de la rotura fibrilar de grado I en la porción larga del bíceps femoral derecho que sufrió en los minutos finales del partido contra el Barcelona y que ayer fue confirmada con una ecografía. La baja del moañés supondrá un revés a nivel colectivo para el Celta y un obstáculo a nivel individual para el futbolista y su sueño mundialista, aunque él se lo toma con filosofía. «Una piedra en el camino me enseñó que mi destino era rodar y rodar», comentaba en jugador en una red social.

En la práctica, Iago se perderá probablemente tres partidos. El de esta semana contra el Valencia ?que no tendrá a Parejo, expulsado?, el de la siguiente jornada frente al Villarreal y seguramente el duelo contra el Deportivo en Balaídos. El derbi se jugará entre el sábado 5 de mayo a las 18.30 horas, y las tres semanas de baja se cumplirían el día 9. Las posibilidades de que el pichichi del Celta llegue para el partido no son muy altas, y el atacante no va a forzar su recuperación, porque se está jugando un premio mayor: el Mundial.

Las lesiones nunca llegan en buen momento, pero la de Aspas lo hace justo cuando el Celta se juega la última bala para meterse en Europa League, y cuando el delantero debía dar el último arreón en su carrera hacia Rusia. Por los méritos coleccionados a lo largo del curso y por la confianza que Julen Lopetegui le ha dado en los últimos compromisos ?respondida con creces sobre el terreno de juego? lo normal sería que el céltico estuviese en la nómina de elegidos, pero tener que parar tres semanas es un revés. En todo caso, si se mira el vaso medio lleno, al moañés aún le quedarán el partido en el Bernabéu y el del Levante para recuperar ritmo de competición, más otras tres semanas de preparación ya con la selección. El altísimo rendimiento que Aspas mostró frente al Barça y el hat-trick frente al Sevilla le avalan.

En el plano colectivo, la baja de Aspas es un importante revés para el Celta, que pierde a su futbolista más determinante y a su principal nicho goleador justo cuando se juega sus últimas cartas europeas. La séptima plaza, que defiende el Sevilla, está a cuatro puntos, y los célticos ?que bajaron ayer a la décima posición tras la victoria del Getafe ante el Valencia?, si quieren seguir en la pomada, no pueden permitirse más errores.

Las alternativas al moañés

La solución a la baja de Iago no es sencilla. En toda la liga únicamente se ausentó del once titular en una ocasión, frente al Villarreal por estar cumpliendo partido de sanción. Ese día Unzué había apostado por un ataque con Maxi Gómez, Sisto por la izquierda y Brais Méndez por la derecha. Esa se presentaría de nuevo como una alternativa válida, aunque implicaría dar una nueva vuelta de tuerca al sistema.

Recuperar el 4-3-3 como punto de partida en ataque permitiría a Unzué jugar con Sisto y Mor en las bandas o confiarle la derecha a Brais, que demostró ante el Barcelona que los retos mayúsculos no le quedan grandes. El abanico de posibilidades que se abre ante el entrenador navarro incluiría también quitar a Emre Mor de las inmediaciones de la línea de cal y situarlo de segunda punta por detrás de Maxi Gómez, o que el rol de Iago lo ejerciese Lucas Boyé. Lo que sucede es que el argentino, a pesar de llevar la etiqueta de delantero, no tiene el instinto afinado en los últimos metros ni es capaz de hacer jugar al equipo, un rol en el que el moañés se desempeña a la perfección. El jugador del filial Dennis Eckert también podría entrar en los planes del preparador.

El Celta echará de menos en los próximos partidos los goles de Aspas, que lleva en liga una veintena, y también su influencia en el juego, además, del punto de liderazgo que aporta.