El danés vuelve hoy a Balaídos para jugar su quinto derbi. Los cuatro anteriores los disputó de celeste
05 may 2018 . Actualizado a las 05:00 h.Michael Krohn-Dehli se une a la lista de jugadores que vistieron la elástica de Celta y Deportivo. El mediocentro danés se despidió del Celta el 23 de mayo del 2015 al finalizar su contrato y marcharse como agente libre al Sevilla y desde el Sánchez Pizjuán pasó el mes de enero pasado a formar parte de la plantilla del Deportivo, por quien fichó por espacio de un año y medio. Hoy, si al final es uno de los elegidos de Seedorf, vivirá su quinto derbi gallego, el primero con la elástica blanquiazul. En sus cuatro citas con el Celta, ganó dos, empató una y perdió otra, en la única que fue suplente con Abel Resino en el banquillo.
Profesional en todos sus actos y acciones, Krohn-Dehli se tomó con naturalidad el cambio el día que llegó a A Coruña. «Es normal que estén un poco enfadados (en Vigo), pero soy la misma persona, no he cambiado porque ahora vaya a jugar en el Deportivo». De celeste, el gran danés dejó una profunda huella. Tenía 29 años cuando llegó como extremo después de brillar en la Eurocopa del 2012 con Dinamarca pero acabó reconvertido a la posición de mediocentro en donde ofreció su mejor rendimiento. Finalizados los tres años de contrato no hubo acuerdo de renovación y se fue al Sevilla, en donde las lesiones le truncaron su progresión.
En el Deportivo ha disputado ocho partidos desde febrero, siete de ellos de titular. De las cuatro últimas citas solo se perdió el partido de Leganés y hoy a punta a parte del trivote.
Una historia conocida
Krohn-Dehli es el último de una larga lista de trasvases que comenzaron en los años 20 del siglo pasado con el mítico Luis Otero (plata en los Juegos Olímpicos de Amberes en 1920) y uno de los causantes de la rivalidad entre Celta y Deportivo por su salida hacia el club coruñés tras jugar el primer partido de la historia céltica. Otro cambio sonado tuvo lugar en los cincuenta con Pahíño, aunque con escala en el Real Madrid. En el fútbol en color destaca la alteración de zamarra de los Vicente Celeiro, Flaco Gil o Gustavo Loureiro y en el cambio de siglo nadie olvida el caso Goran Djorovic. La historia hasta se alimenta dedos jugadores que hicieron tres veces el camino.
Un trasvase del que tampoco son ajenos los entrenadores, con nueve cambios conocidos.