El defensor ghanés se muestra feliz en el Celta y ambicioso con los objetivos del equipo
13 oct 2019 . Actualizado a las 05:00 h.Joseph Aidoo (Ghana, 1995) responde a todo con una sonrisa de oreja a oreja. Feliz en Vigo, adonde se trasladó con su pareja y hijo de dos años, destaca que en el equipo todo el mundo le recibió con los brazos abiertos y que el fútbol español le está sirviendo para crecer. Admite que tiene una gran confianza en sí mismo y que es ambicioso tanto en lo individual como en lo colectivo. De Vigo le encanta «lo abierta que es la gente» y lo querido que se ha sentido desde el primer momento. Con el español aún no se anima.
-¿Cómo se está sintiendo en estas primeras semanas en el Celta?
-Estoy muy a gusto, todos los compañeros intentan ayudarme, se han abierto a mí desde el primer momento. Si ven que no entiendo algo, enseguida alguien me lo explica en inglés. Están muy atentos siempre y me lo han puesto muy fácil.
-¿Le perjudica en estos primeros partidos desconocer el idioma?
-No es tan difícil como se pueda pensar, porque al final el fútbol en sí mismo es un idioma que hablamos todos los que estamos aquí. Puedes entenderte bien aunque uno hable francés y otro español, que seas capaz de hacerlo es lo importante. Conozco algunas palabras, como izquierda o derecha, el vocabulario básico.
-La pareja de centrales que forma con Néstor parece haberse consolidado.
-Sí, me siento muy bien con él. Es un gran futbolista y formamos una buena pareja.
-¿Esperaba tener tantos minutos desde el principio?
-Soy una persona que no se rinde, nunca me doy por vencido. Estaba preparado para no tener minutos y luchar lo que hiciera falta. Ahora estoy jugando e intento probarme a mí mismo que puedo mejorar en cada partido y así tener más posibilidades de seguir contando para el entrenador.
-¿Cuáles son las principales diferencias que aprecia entre el fútbol español y las ligas que conocía hasta ahora?
-El fútbol español está lleno de talento y calidad individual para ponerlo en conjunto y formar grandes equipos. Ese talento supera a las ligas en las que había estado y la diferencia se nota en el campo.
-Llama la atención su capacidad para saltar. ¿Cómo se logra?
-Es cierto que es algo que me caracteriza y que es una cualidad mía que choca a la gente, pero no lo sé, no es algo que entrene ni que trabaje de manera específica, es innato, natural. Lo mismo que los músculos, que los heredé de mi padre y que también los tiene mi hermano, que no se dedica al deporte.
-Escribá comentó que puede mejorar tácticamente, ¿usted dónde se ve margen de mejora?
-En todos los aspectos: correr, saltar, con balón, en la concentración... El entrenador no me pide que cambie nada, sino que mejore lo que ya estoy haciendo bien.
-¿Siente que ha mejorado en el tiempo que lleva aquí?
-Sin duda, pero queda mucho.
-¿Cómo le afectó el error que cometió frente al Eibar?
-Como jugador profesional, siempre estás expuesto a cometer errores y tienes que ser consciente de ello, del primer día al último. Tienes que aceptarlo, ser fuerte y mirar hacia adelante. No me afectó para nada a nivel de confianza. Tengo mucha seguridad en mí mismo y también sé que estas cosas pueden pasar.
-¿Cómo vivió esas jornadas de malos resultados y con el entrenador en el punto de mira?
-Creo que hay mucho que mejorar, en los partidos se ha visto que intentamos jugar mejor y vamos a conseguirlo. Escribá es un gran entrenador. Recuerdo mi primer partido aquí, que vino y me dijo: «No tienes que demostrar nada, sé lo que sabes hacer, hazlo». Me grabé eso en la mente y me dije: «Vamos a hacerlo».
-¿Esperaba un inicio mejor?
-Sí, pudo serlo, pero seguro que iremos creciendo.
-Se ha visto una mejora en el balón parado. ¿Están incidiendo de manera especial en ello?
-Sí, sé que el Celta tenía problemas en esta faceta y como equipo estamos intentando mejorarlo.
-¿Cuál es el objetivo del equipo?
-No me gusta perder, pero es parte de la vida. Aunque ahora no estamos en la parte alta, tenemos jugadores para estarlo. Para mí el objetivo es Europa League o incluso Champions. Es mi opinión personal y mi deseo.
-El próximo partido es frente al Alavés. ¿Qué sabe de este equipo?
-No mucho todavía. Solo sé que allí juega otro ghanés, Wakaso.
-¿Cuál es su situación en la selección nacional de Ghana?
-Soy parte del equipo, pero no tenemos partidos ahora, el próximo que tenemos, clasificatorio, será en noviembre. Soy fijo, voy siempre convocado.
-¿Qué sabía del Celta antes de venir?
-Conocía el club, pero no demasiado. Sabía que jugaron Europa League contra mi exequipo, el Genk. Conocía a Aspas, que ahora es muy cercano conmigo, y también a Sisto. Recuerdo verle algún partido del Celta y pensar: '¿Quién es ese chico?'.
-Se ha hablado mucho de la situación personal de Sisto en los últimos meses y apenas está jugando. ¿Usted cómo le ve?
-Son cosas del fútbol que no juegue tanto. A veces hay más de un jugador con cualidades parecidas para el mismo puesto y el entrenador tiene que elegir. Todos los futbolistas tienen las mismas oportunidades y talento. Personalmente, no sé mucho de él, pero siempre que estamos juntos hablamos y nos reímos.
-¿Es muy diferente la vida en Vigo respecto a lo que estaba acostumbrado?
-Sí, el sitio donde vivía en Bélgica no es tan grande y es distinto. Lo que más me gusta de los españoles es que son muy abiertos, me gusta mucho encontrarme con los aficionados, que me reconocen, me paran y me hablan. Me hacen muy feliz.