El Celta se enfrenta a una de las sensaciones de este inicio de Liga
27 oct 2019 . Actualizado a las 05:00 h.La Real Sociedad llega a Vigo como una de las sensaciones de la Liga en el arranque de temporada. Aunque su técnico, Imanol Alguacil insistía en la previa en que tienen muchas cosas que mejorar y que no comparte que estén jugando tan bien como se dice, lo cierto es que se plantaron en la décima jornada con 16 puntos.
El conjunto de Donosti ha sumado fuera de casa siete puntos de quince posibles. Derrotaron en sus campos al Mallorca y al Espanyol, sacaron un punto en Mestalla en la primera jornada y se volvieron de vacío de sus visitas al Sevilla y al Athletic Club. Llevan el mismo número de goles a favor y en contra fuera de su feudo, un total de siete.
Imanol ha apostado casi siempre esta temporada por un esquema de 4-3-3, con alguna visita al 4-2-3-1. En su repertorio desde que es entrenador de la Real también han tenido cabida otros dibujos como el 4-4-2 en rombo o el 5-3-2. En alguna ocasión ha comentado que es partidario de la variedad para disponer de diferentes posibilidades.
Hay solo dos futbolistas en el equipo que lo han jugado todo. Uno es el fichaje estrella del pasado verano, el centrocampista noruego Martin Ødegaard, que ha marcado dos goles y que además el único futbolista del equipo que lo ha jugado todo (810 minutos). El otro fijo en los onces es el delantero Mikel Oyarzábal, que además es el máximo goleador del equipo junto con William José, ambos con cuatro goles cada uno. Monreal, Mikel Merino, Portu e Isak completan la nómina de goleadores del conjunto txuri urdin.
Imanol se caracteriza por la búsqueda de un juego agresivo y con ritmo que está consiguiendo que refleje su equipo. Apuesta por la presión ala, líneas separadas y un juego vertical y rápido en ataque.
Si tiene una asignatura pendiente en lo que va de temporada es sin balón. El equipo no ha acabado de encontrarse cómodo cuando no es capaz de llevar la iniciativa. Su fuerte es el robo de balón para, a base de rapidez y efectividad, hacer daño en campo contrario, pero sufren cuando se meten atrás.
