El Club Deportivo Peña Azagresa solo tiene dos años menos que el Celta -fue fundado en 1925-, pero para este club de un municipio que no lleva a 4.000 habitantes por los cerca de 300.000 de Vigo, la presente edición de la Copa del Rey será la primera en la que participen. Todo un hito para un club humilde que hace unos días celebraba por todo lo alto el haber conseguido eliminar al Fraga en la previa para asegurarse un sueño cumplido.
Como era el caso del Pontellas, que se quedó a las puertas, la Peña Azagresa también pudo aspirar a este billete copero como campeón de Preferente. La pasada temporada logró el ascenso a Tercera para militar en esta categoría por quinta vez en su historia tras haberlo hecho también de forma consecutiva entre los años 2008 y 2011 y en la campaña 2012/2013. Les costó seis años regresar a la categoría tras varias temporadas coqueteando con los puestos altos de Preferente, pero sin lograr el ascenso.
De la mano de Rafael Bericat, y con una plantilla formada en su mayor parte por futbolistas de casa, el curso pasado llegó por fin el premio. Fueron campeones de Liga con doce puntos de ventaja sobre el segundo, el Fontellas, y ahora están inmersos en la lucha por la permanencia en la cuarta categoría del fútbol español.
En liga esta temporada llevan tres victorias, cuatro empates y seis derrotas que les sitúan en la decimosexta plaza con trece puntos y uno de margen sobre la zona de descenso. Tras ganar por la mínima al Fraga para certificar su billete para la Copa, este sábado perdieron ante el Ardoi por un resultado de 2-0. Piqueras, Ignacio y Miguel, con tres tantos cada uno, son sus máximos goleadores. Llevan 15 goles a favor y han recibido 23.
Precedentes contra Terceras
No será la primera vez que el Celta se mida en Copa del Rey a equipos de Tercera División. En la última ocasión que ocurrió, en la temporada 2005/2006, le correspondió el Tenisca, al que ganaron por 1-3 con un hat trick de Perera el 20 de octubre del 2005.
Cuatro años antes, en el 2001 y según datos de Afouteza e Corazón, se habían medido al Lemona y también salieron victoriosos (2-3, goles celestes de Doriva, Catanha y, en la prórroga a la que se llegó, de Edú).
En el caso del Lalín, en 1990, había sido a doble partido, con el rival ganando 1-0 en la ida y el Celta resolviendo el cruce con un 2-0 en Balaídos y goles de Maric y Moska. También Chantrea y Marbella (único que apeó al Celta) se las vieron con el equipo vigués estando en Tercera.