El Juzgado de Primera Instancia número 1 de Vera (Almería) acordó continuar el procedimiento penal abierto en junio de hace dos años contra el céltico y Goldar
03 dic 2019 . Actualizado a las 05:00 h.El Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 1 de Vera (Almería) acordó continuar el procedimiento penal abierto en junio del 2017 contra los jugadores de fútbol Santi Mina y David Goldar, a quienes se acusa indiciariamente de agredir sexualmente a una joven en Mojácar, aunque las relaciones sexuales no se llegaron a producir. La denunciante asegura que fue víctima de tocamientos. Según confirmaron a diversos medios fuentes judiciales. Esto significa que la posibilidad de juicio está más cerca para el que delantero del Celta y el canterano del conjunto vigués. Con esta resolución se considera que lejos de archivar el caso la jueza ve indicios de que hubo delito.
Fuentes del Tribunal Superior de Justicia de Almería (TSJA) informaron ayer de la medida acordada por la jueza el pasado 22 de noviembre a petición de la Fiscalía de Almería, si bien no se ha dictado aún un auto de procesamiento. Contra ella caben recursos de reforma ante la propia instructora y de apelación ante la Audiencia. El anuncio de la Fiscalía puede considerarse un anticipo de por dónde irá su escrito de calificación.
La incoación del sumario que ahora se va a lleva a cabo significa que el asunto será investigado y una vez cerrado se celebraría un juicio oral con penas que podrían llegar a rondar entre los seis y diez años de cárcel, aunque también cabe la posibilidad de que la condena, en caso de existir, fuera mucho menor. Del mismo modo no puede descartarse un acuerdo antes del juicio para evitar ir a prisión.
El futbolista del Celta fue detenido en junio del 2017 en el municipio de Mojácar después de que la víctima denunciase ante la Guardia Civil que le había sometido a tocamientos. En concreto, relató que la presunta agresión sexual se produjo cuando estaban en una caravana con un amigo del delantero, el futbolista David Goldar, con el que había pasado la noche en un local de copas y también investigado en la causa. En este sentido existe el agravante de prevalimiento, lo que significa que actuó con la ventaja de superioridad.
David Goldar, que en la actualidad milita en el Nástic de Tarragona, por su parte, también declaró ante el juez e igualmente en calidad de investigado (antes imputado), aunque aún no se ha determinado si como presunto colaborador del delito que se le imputa a Mina o por un delito de omisión del deber del socorro.
La joven también afirmó que quien era en el momento de los hechos investigados jugador del Valencia CF había entrado desnudo en el vehículo y que había intentado mantener relaciones sexuales con ella, que no se llegaron a producir. Tras producirse la detención en junio de 2017 y el posterior paso a disposición judicial, desde el entorno del jugador confirmaron la veracidad del asunto pero aseguraron que ha habido «una versión exagerada» de los hechos por parte de la joven que denunció.
Silencio del Celta
El Celta decidió guardar silencio, tras conocer que el caso seguía adelante. El Nastic, por su parte, indicó que no tenía constancia de que su futbolista estuviese involucrado en el asunto.