El que fue entrenador del rival del Celta en Copa analiza las claves de la eliminatoria que se disputa mañana
23 ene 2020 . Actualizado a las 18:17 h.El Mirandés, rival del Celta en la eliminatoria de Copa que se disputa mañana y equipo de Segunda, consiguió su último ascenso la temporada pasada con Borja Jiménez al frente. El también exentrenador del Rápido de Bouzas admite un cariño especial por los equipos vigueses a raíz de su paso por la ciudad y analiza este cruce copero desde el conocimiento de ambas realidades, aunque sea en la distancia.
El cruce
«Va a ser una eliminatoria igualada»
A pesar de la diferencia de categoría, Jiménez augura una eliminatoria igualada en la que concede una gran importancia al factor campo. Destaca, en ese sentido, «el poder que tiene Anduva, la dificultad de ganar allí cualquier partido». Recuerda también que el equipo de Miranda de Ebro está «haciendo las cosas muy bien, en una buena dinámica», y menciona otro factor que puede tener su importancia. «Encima han descansado este fin de semana al no haber podido jugar su partido», en referencia a la suspensión del duelo frente al Zaragoza por las fuertes lluvias que se registraron el sábado en Miranda de Ebro, por lo que no sabe «si seguirán con las rotaciones». «Va a ser igualado como casi todos los partidos allí. El factor Anduva puede ser determinante, nadie gana fácil».
Favorito
«El Celta lo es a priori por nombres y categoría»
Jiménez concede el favoritismo al Celta «a priori por nombres de jugadores y categoría», pero pone el foco en el momento que atraviesa el Mirandés, sobre todo como local. «En tres años creo que llevará tres o cuatro derrotas en casa como mucho. Eso dice mucho de lo que significa jugar en Anduva», advierte. Con él al frente solo perdieron en una ocasión como locales, en la última jornada cuando ya estaban clasificados para el play-off.
El rival
«El Mirandés tiene jugadores de otra categoría»
Preguntado por los puntos fuertes del Mirandés más allá de sus buenos resultados como local, el técnico dice que «ahora mismo a nivel colectivo se están sintiendo muy cómodos transitando». «Tienen jugadores del centro del campo para adelante con mucho talento, posiblemente de otra categoría. A nivel defensivo se mantiene la línea del año pasado y llevan muchos años juntos», apunta. Considera que esa complicidad que les da el tiempo que llevan muchos de sus futbolistas compartiendo vestuario los hace «un equipo peligroso».
La situación del celta
«El momento del rival puede beneficiar al Mirandés»
Jiménez confiesa que cogió «mucho cariño» a la ciudad y a sus equipos durante su paso por Vigo, por lo que suele estar pendiente de los célticos. «No sé cómo se va a plantear la Copa el Celta, pero intuyo que se centrarán más en la Liga y sí es cierto que su situación en Liga puede beneficiar al Mirandés», opina. Su lectura del momento de los de Óscar en competición doméstica es que «se habían creado muchas expectativas por fichajes que hacían indicar que estarían arriba, de gente que ya había estado en el club y muchas veces cuando el inicio no es bueno luego viene los problemas», razona. En todo caso, espera «de corazón» que el Celta «no pase muchos problemas para mantener la categoría».
Condicionantes
El formato y la historia
El entrenador recuerda que la Copa es una competición que trae buenos recuerdos a Miranda. «Todo el mundo recuerda las semis contra el Athletic y en la ciudad y en el club siempre hay esperanzas de poder repetir algo similar», apunta. Además, con el nuevo formato, que alaba, cree que «todo eso es más sencillo». «Es un aliciente para todos los equipos. Ser a partido único lo hace más interesante. Antes los grandes la ida casi siempre la acababan regalando y ha sido un acierto». En cuanto al ambiente en Anduva, considera que es especial: «Es de los pocos campos que quedan en que sientes a la gente cerca, apoyando en todo momento y con un gran ambiente de fútbol».