El charrúa apunta a titular en un Celta que quiere seguir en la Copa pero con los menos habituales
23 ene 2020 . Actualizado a las 05:00 h.El futuro inmediato del Toro Fernández puede estar lejos de Vigo. Lo admite hasta el propio entrenador, aunque a nivel personal el charrúa no le ha pedido salir. Pero antes de salir de dudas (el viernes 31 de enero lo más tarde), el delantero parece tener un último servicio, ser la referencia ofensiva del Celta esta tarde (19 horas, DAZN) en Anduva en la tercera eliminatoria de la Copa del Rey a partido único. Santi Mina no viajó y Iago Aspas necesita un respiro, de ahí que todos los ojos se centren en el uruguayo.
El Toro, que está inédito en los últimos partidos de Liga, fue titular ante la Peña Azagresa en la primera ronda, pero se quedó en blanco mientras Juan Hernández marcó por partida doble. Frente al Mérida, un problema físico le apartó de la convocatoria aunque llegó a viajar a Extremadura y ahora ante el Mirandés debe afinar la puntería. Más allá de que permanezca en Vigo el 1 de febrero y que no se haya adaptado, debe demostrar el halo goleador que le trajo a Europa a cambio de cuatro millones de euros.
El Toro debe ser la punta de lanza de un once céltico en donde solo puede caber un jugador del filial (el central Fontán que podía ejercer de lateral izquierdo para darle tregua a Olaza) y que será de lo más reconocible, aunque con los menos habituales sobre el campo.
Por eso se espera a Sergio Álvarez en la portería, el tándem Aidoo-Jorge Sáenz como centrales toda vez que el San Mamés Murillo ya se hizo con la titularidad nada más llegar y un centro del campo que por reparto de minutos debiera ser para Pape, Brais y Denis Suárez. De los tres solo el mosense fue titular el domingo en liga y los otros dos tuvieron minutos en la recta final, aunque con nulo protagonismo. Con Okay descartado, Beltrán puede ser otra opción si el campo necesita de recorrido y músculo, pero en las últimas jornadas el toledano está siendo una pieza fija para Óscar García Junyent. En las bandas, debieran coincidir en el campo los únicos dos futbolistas con perfil de extremos: Juan Hernández y Pione Sisto. Ambos sin protagonismo el domingo pasado. En la elección del once puede tener mucho que ver el césped de Anduva, que estará alto y además encharcado por mor de las últimas lluvias.
Y aunque no sea con el once de gala -a priori los Aspas y compañía estarán en el banquillo- los vigueses no viajaron a la localidad burgalesa de paseo ni pensando en la final del domingo ante el Eibar en Liga, sino con la intención de continuar en la Copa del Rey, un torneo que solo puede ser un refuerzo positivo según el entrenador.
El Mirandés, por su parte, quiere alimentar su tradición copera con un equipo de garantías sobre el césped. No será la primera vez que los celestes visiten al mítico Anduva. Ya lo hicieron en la campaña 80/81 en Segunda B en un partido que acabó con triunfo por la mínima de los locales. Un resultado que los célticos no se deben permitir esta noche. Por mucho que la Liga necesite de toda la atención para salvar otro año en el alambre.