La falta de contundencia condena al Celta
Los vigueses se adelantaron en el marcador pero la Real Sociedad remontó en 17 minutos: 2-1
En el fútbol mandan las áreas. De poco vale que el Celta le plantee un encuentro entre iguales a la Real Sociedad si tras adelantarse en el marcador permite que los donostiarras le den la vuelta al marcador en 17 minutos. Con un regalo para Portu y con un penalti demasiado ingenuo para los inciertos tiempos que correr en materia de reglamento. Por encima, todo el empuje del segundo tiempo fue en balde. Mucho balón y pocas ocasiones ante los inquilinos de Anoeta, que acabaron perdiendo tiempo y pidiendo la hora. Esta falta de contundencia en los territorios en donde se decide el fútbol privó al Celta de puntuar. Los vigueses, después de 32 jornadas de liga siguen sin ser capaces de ganarle a uno de los conjuntos de zona europea.
Los partidos del Celta a estas alturas de abril se han vuelto previsibles. El domingo pasado, en Cádiz, plomizo y sin goles, en jueves en Anoeta, frenético, con alternativas y con dos equipos a tumba abierta. El problema fue que los vigueses demostraron que lo suyo no es defender ventajas, porque su preponderancia en el marcador duró tres minutos.
El tiempo que fue desde el cabezazo ganador de Hugo Mallo a saque de córner a la licencia defensiva que dejó solo a Portu ante Iván Villar para marcar tras unas buena asistencia de Carlos Fernández. Dos jugadores en los que pensó el Celta en verano diferentes y acabaron vistiendo la elástica txuri-urdin.
A la electricidad de los dos equipos hubo que unirle le concierto de silbato de Gil Manzano con el VAR haciendo los coros. Primero para enseñarle una amarilla a Aritz Elustondo tras un duro encontronazo con Santi Mina y después para señalar dos penaltis en el margen de 11 minutos. El primero tuvo a Iván Villar como protagonista. Porque arrolló a Isak en el lateral del área y porque adivinó el lanzamiento de sueco para parar el primer penalti en un lustro del conjunto vigués. Un acierto que necesitó de la revisión posterior del VAR para confirmar que alguna parte de su pie derecho estaba en contacto con la línea de gol.
El segundo fue una ingenuidad de Murillo. Le puso el brazo en el hombro a Le Normand y el central se fue encantado al suelo. Lanzó Januzaj por el centro de la portería y marcó el segundo. La Real había tardado 17 minutos en darle la vuelta al marcador.
El segundo tiempo comenzó igual de loco pero fue otra historia. Santi Mina estuvo a punto de culminar en gol una asistencia de Brais y a la jugada siguiente Portu estrelló en balón en el palo. Pero enseguida el fútbol comenzó a bajar de revoluciones. Porque así lo quiso la Real Sociedad, que comenzó a jugar con el marcador, a perder tiempo, a recular metros y a buscar una contra que en realidad nunca existió.
Entonces el Celta se hizo dueño del balón pero su dominio no tuvo correspondencia con las ocasiones reales. Incluso Coudet buscó nuevas vías cambiando a Aarón por Fontán y a Denis y Beltrán, sin cambiar de posiciones y manteniendo la estructura. Quizás buscase más refresco, pero el problema del conjunto vigués estaba en los metros finales.
Remiro solo tuvo que intervenir en un flojo disparo de Tapia y estar atento en los dos lances postreros cuando el Chacho ya se había cargado a un central para poner en el campo a Ferreyra. Fue el argentino el que remató con intención de cabeza y que no pudo llegar a un centro raso y envenenado de Solari cuando el partido estaba a punto de expirar. Demasiado poco para terminar de lastimar a un rival que terminó pidiendo la hora pero que terminó llevándose un punto que invita al Celta a cerrar cuanto antes la permanencia.
Ficha técnica:
2- Real Sociedad: Remiro; Gorosabel, Aritz, Le Normand (Sagnan. min.85), Monreal; Portu, Guevara (Zubimendi, min. 68), Guridi, Januzaj (Oyarzabal, min. 46), Carlos Fernández (Bautista, min. 71) e Isak (Barrenetxea, min. 68).
1- Celta: Villar; Martín (Fontán, min. 61), Murillo, Araujo (Ferreyra, min. 85), Mallo; Tapia, Nolito (Solari, min. 78), Suárez (Fran Beltrán, min. 61), Méndez, Aspas, Santi Mina.
Árbitro: Gil Manzano (Comité Extremeño). Amonestó a Aritz, Sagnan, Barrenetxea, Murillo, Mallo, Nolito, Suárez, Aspas y Carlos Fernández.
Goles: 0-1, min. 23: Mallo. 1-1, min. 2-1, min. 39: Januzaj, de penalti.
Incidencias: Partido de la jornada 31 de LaLiga Santander disputado a puerta cerrada en San Sebastián. Ambos equipos posaron con camisetas en contra de la creación de la Superliga, con la leyenda «Ni grandes, ni pequeños, queremos seguir soñando» en euskera y gallego.