Un grupo de aficionados que viven en Madrid viajaron a Vigo para ver a su ídolo; ya se sienten celtistas
08 mar 2022 . Actualizado a las 12:08 h.«De esto se trata el fútbol, de hacer feliz a la gente, de que los aficionados disfrutemos de este mágico deporte, de crear momentos felices», escribía Mauricio Seelbach en Twitter tras el Celta-Mallorca. Lo hacía con una foto de un jugador que no intervino en la victoria, pero al que él, junto con un grupo de amigos mexicanos, habían ido a ver desde Madrid: Orbelín Pineda. «Gracias, Orbelín, eres grande», escribía en la misma línea de otro de los amigos de la foto, Pedro Portal, que apuntaba: «Demostrando el deber ser del fútbol. Gracias por el detalle y felicitaciones por el resultado».
Los chavales que comparten protagonismo en la imagen con el jugador del Celta son un grupo de mexicanos que actualmente residen y estudian en Madrid. «Al Celta de Vigo lo llevamos siguiendo hace tiempo con la llegada de Néstor Araujo y ahora, con el fichaje de Orbelín, el equipo empieza a sonar más en México», cuenta Mauricio. Planearon el viaje hace dos semanas: «Teníamos ganar de ir Vigo a comer, conocer y ver fútbol. Coincidió que uno de los del grupo cumplía años y que además habría partido en el Balaídos», cuenta. Así que compraron las entradas con una semana de antelación y asegura que vivieron en Vigo «una experiencia increíble y única».
Los aficionados se situaron en la primera fila de Tribuna Baja, junto al túnel de vestuarios. «En cuanto salió, empezamos a corear 'Orbee, Orbee' y teníamos la playera del Cruz Azul, equipo del cual proviene Orbelín y con el que fue campeón en junio 2020. Volteó a vernos y nos saludó; al final del primer tiempo, repetimos lo mismo», relata. Así que fue al final del partido cuando se acertó a ellos a saludarlos más detenidamente. «Realmente es una gran persona, a muchos futbolistas se le sube la fama con el solo hecho de jugar en Europa y algunos de ellos ni voltean a ver», explica Seelbach.
Para ellos, «Orbelín es humilde fuera y dentro del campo» y le están muy agradecidos por el gesto. «Ayer hizo felices a un grupo de seis mexicanos, no por el hecho de que nos regalara una foto, sino porque nos recordó que el fútbol es de y para la gente», celebra. Además, defiende que el tiempo demostrará que ha sido un buen fichaje para el equipo vigués. «Solo es cuestión de que el míster le dé minutos y confianza. Entiendo que esté en período de adaptación, pero será importante que tenga oportunidades para demostrar su calidad».
Aunque no pudieron ver a Pineda en acción, se llevan igualmente un gran recuerdo del partido. «Me pareció una locura. Creo que en los dos primeros goles del Mallorca la defensa estuvo medio dormida y no se diga el árbitro, de esos que quieren ser protagonistas...», comenta. Pero celebra el desenlace: «Afortunadamente, al final se pitó el penal y Iago Aspas lo definió como solo Iago lo sabe hacer y se llevaron los tres puntos».
El estadio le pareció «increíble, tradicional pero con estos nuevos tintes modernos, bastante amigable y donde el fútbol se ve bien de cualquier lugar», mencionando que cuando lo terminen «el fondo será mejor». Define lo viví una experiencia que nunca olvidará y espera regresar pronto a Vigo y a Balaídos, donde estuvieron de viernes a lunes, para llegar a Madrid e ir a clase por la tarde.
Ellos viajaron con la vista puesta en los mexicanos. «Me enorgullece ver que compatriotas den el salto a jugar en Europa. Sé que al principio puede resultar un poco difícil el cambio de estilo de juego, de ciudad, de país... Es una aventura nueva y nos gusta ir a apoyarlos para que sepan que no están solos», algo que han hecho en otros estadios desde que están en España. Pero asegura que le tienen cariño al Celta y más tras este Celta-Mallorca: «Después de la experiencia de ir a Balaídos, ¡¡ten por seguro que apoyaré al Celta!!».
