La entidad confirma que se ve obligada a admitirlo en los entrenamientos y se reserva la opción de pedir daños y perjuicios si la sentencia llega a ser firme
18 jul 2022 . Actualizado a las 20:28 h.El Celta ha informado esta mañana de que ha recibido en las últimas horas una comunicación oficial relacionada con la situación del futbolista Santi Mina, condenado semanas atrás por abuso sexual y apartado del equipo desde entonces. «A través de un burofax, exige al RC Celta su incorporación inmediata a los entrenamientos del equipo, por lo que, en este caso, el club se ve obligado a asumir la presencia del jugador desde este momento en las sesiones de preparación dentro de los horarios estipulados con sus compañeros», indica la entidad.
Desde el club señalan que «el Celta se reserva su derecho de reclamar, si la sentencia deviene firme, todos los daños y perjuicios ocasionados por el comportamiento del jugador a la entidad tanto económicos como de imagen del club, respetando a día de hoy su derecho a recurso». Asimismo, destacan que «el futbolista, dada la situación judicial que ha generado y que daña la imagen de este club, ha rechazado una oferta para jugar en un equipo de otra liga».
Por último, el Celta expresa que «nunca se dejará presionar por ningún trabajador que busque sus intereses particulares y, además, muestra su sorpresa por este movimiento del jugador encaminado a dañar al RC Celta, que desde la sentencia judicial obró conforme a los valores de este club y de su afición y a los que no renunciará bajo ningún concepto».
Mina fue condenado a cuatro años de prisión por abuso sexual en una sentencia que se hizo pública a principios de mayo y por unos hechos que se remontan al año 2017. El club vigués en todo momento apeló a la presunción de inocencia, hasta el punto de que, tras la celebración del juicio, a finales de marzo y principios de abril, siguió siendo uno más de la plantilla -Eduardo Coudet expresó públicamente que así sería- e incluso tuvo minutos en el partido más inmediato sin haber entrenado esa semana.
Fue cuando hubo sentencia cuando el club apartó al futbolista, le suspendió de empleo y sueldo y lo hizo desaparecer de su página web, además de que dejó de ser seguido en redes sociales por los perfiles oficiales del club. Su última aparición pública fue en la boda de Denis Suárez, celebrada a finales de mayo. De la fiesta trascendió una imagen donde se le podía ver posando con más invitados que están o han estado vinculados al Celta y que fue colgada en Instagram por uno de sus protagonistas.