El catalán alcanza su mejor nivel en el Celta en Cornellá dando la asistencia del primer gol, provocando un penalti y marcando
20 mar 2023 . Actualizado a las 20:21 h.Carles Pérez llegó a finales de agosto a Vigo con la intención de explotar, pero el pasado 5 de marzo comentó en una entrevista en La Voz que todavía no había llegado a ese nivel argumentando que «explotar es llegar al nivel de generar, marcar y crear la diferencia y en eso es lo que estoy trabajando». Tenía razón: ese muestrario lo tenía guardado para el partido de Cornellá, en donde generó la asistencia del primer gol, marcó diferencias provocando el penalti del segundo y redondeó el día marcando, al fin, su primer gol en liga. Nunca había tenido que esperar tanto para celebrar un tanto en la competición regular. «Estoy muy feliz, llevaba semanas buscándolo y estoy muy contento de poder ayudar al equipo», comentó el extremo catalán, que jugó tres años en el Espanyol en su etapa de formación, tras el partido.
Cedido por la Roma en el Celta, Carles Pérez nunca había tenido tanto protagonismo en un equipo desde su etapa de formación en el Barça B. A estas alturas de temporada, el catalán ha participado en los 26 partidos de liga y ahora acumula ocho encuentros como titular. La llegada de Carlos Carvalhal y el cambio de sistema han provocado un vuelco radical en su rendimiento, porque le permiten sacar a relucir su catálogo de virtudes: «Yo siempre he sido un extremo de estar abierto, de encarar y de provocar cosas, de ir al espacio», comentó en su día el futbolista.
Poco a poco, había ido subiendo el listón de su contribución al equipo, pero tenía pendiente la cuenta del gol, un aspecto que le llegó a producir cierta ansiedad. Pero mantuvo la paciencia en todo momento y, finalmente, pudo celebrar con rabia su primera diana válida en la liga. «El Chuky (Franco Cervi) me la dio atrás, pude controlarla con el pecho y la he definido bien. Estoy muy contento». Fue su único tiro a palos en todo el partido en una contienda en donde se convirtió en el regateador del partido con ocho quiebros. Provocó, además, cinco faltas.
De un modo paralelo a su protagonismo ofensivo, Carvalhal le fue aumentando la exigencia defensiva. «El equipo está tranquilo cuando le atacan», comentó ayer al respecto. A él le toca ayudar a un lateral derecho que en los últimos tiempos ha cambiado de manos debido a la lesión de Óscar Mingueza. Hugo Mallo y Kevin Vázquez han sido sus últimos compañeros de baile. Frente al Espanyol hizo tres faltas y bloqueó tres balones.
Este compendio defensa-ataque han llevado a Carvalhal a reconocer en público el momento del futbolista de Granollers. «Lo de Carles es una evidencia, que tiene que ser tan bueno defendiendo como atacando. Ahora lo está haciendo muy bien».
Opción de 10 millones
Carles está en Vigo con una opción de compra de 10 millones de euros, pero el próximo 30 de junio entrará en su último año de contrato con el cuadro romano, lo que podría hacer variar las cantidades si el Celta decide mover ficha para tenerlo en propiedad el próximo ejercicio. El futbolista ya comentó en público su deseo de seguir en Vigo, pero también dejó claro que todavía falta para la decisión final y que ahora toca centrarse en lo que resta de liga, en un escenario que invita a soñar: «La situación en la tabla nos da tranquilidad e ilusión para encarar los partidos que nos vienen».
El Almería será el próximo reto y en esa cita, Carles Pérez tendrá la oportunidad de estrenarse en casa como goleador. Todavía no lo ha hecho aunque la semana pasada un rebote suyo terminó en gol y en el partido ante el Athletic llegó a celebrar la diana antes de que fuera anulada. Ahora ya se ha sacado la presión de encima.
