Carlos Cao, director de operaciones y relaciones institucionales, confiesa que existe «preocupación e incertidume» pero descarta presentar una queja formal
29 oct 2023 . Actualizado a las 05:00 h.La planta noble del Celta rompió su silencio después del atropello ante el Girona. El gol anulado a Luca de la Torre por la inexistente falta a Gazzaniga, de la que se inhibió el VAR, parece haber colmado el vaso de la paciencia. Además, el lance llegó en la semana en la que una delegación celeste al más alto nivel visitó a Luis Medina Cantalejo, el presidente de los árbitros, para quejarse de errores anteriores, pero ninguno tan grosero como el del viernes. En los 11 partidos que van de temporada, al Celta le han perjudicado el árbitro y el VAR en siete ocasiones: cuatro goles anulados, dos expulsiones y un penalti a favor no señalado.
Por eso, el club pide respeto. Lo reclama por medio de Carlos Cao, director de operaciones y relaciones institucionales y mano derecha de la futura presidenta, Marián Mouriño. «Temos que afrontar a situación con toda a fortaleza do mundo e pedir que se teña respecto por un club centenario, que non sae nos medios protestando porque é un dos nosos valores. Que se teña respecto ao celtismo, que penso que non se está tendo», comentó el ejecutivo en la tarde de ayer en Barreiro, en donde siguió en directo el partido del Celta B.
Porque el club, pese a la visita de Marián Mouriño y Juan Carlos Calero (el coordinador deportivo) al CTA, admiten tener sensación de «incertidume» por las decisiones arbitrales. «Non atopas explicación ao que está pasando. O de onte (por el viernes) é tremendo. Tivemos unha reunión esta semana con CTA e dan explicacións que valen para un partido e co Girona, non, ou son as contrarias», analiza Cao.
Ante esta situación, en el Celta admite que ya no saben qué más pueden hacer con el estamento arbitral. «Realmente, hai pouco máis hai que facer que estar unidos, seguir traballando e corrixir erros que si cometemos, tanto individual como colectivamente. Cos erros arbitrais pouco máis podemos facer na situación na que estamos».
Del mismo modo, descartan una protesta formal porque entienden que no valdría para nada. «Xa tivemos esa reunión, xa trasladamos a preocupación por parte do club e aí quedou. Deron explicacións e a realidade é a que vistes», ahondó. Ahí se detuvo en lo ocurrido este viernes: «Volvemos a un partido completo do equipo e no minuto 85, unha situación drástica cambia o sino do partido e volves con cara de incredulidade». El ejecutivo comentó entre los errores arbitrales y los propios el equipo se ha dejado por el camino «facilmente seis, oito ou dez puntos».
De un modo paralelo, Carlos Cao aprovechó para confirmar en público que la confianza en Rafa Benítez es ilimitada. «Reiteramos a confianza. Estamos inmersos nun proxecto de tres anos, é para o que veu Rafa e estamos encantados de que siga. Hai que chamar á unidade total de todos e trasladar a impotencia en enerxía no verde». Sostiene que ahí es donde deben trabajar, pensando ya en el partido de este próximo fin de semana frente al Sevilla para que sea «o punto de inflexión» que buscan y que debe «chegar canto antes».
El club ya dejó claro desde el primer momento que a diferencia de los años anteriores, en donde los ceses se sucedían en cada mal arranque, en esta ocasión, están dispuestos a mantener la calma, convencidos de que Benítez es la persona idónea para liderar el proyecto y están convencidos de que terminará dándole la vuelta a la situación. Frente al Sevilla debe dar el primer paso.