Cristina Lijó es una de las afortunadas de la lista de espera del Celta del 2023 que han podio gestiona sus carnés
08 ago 2024 . Actualizado a las 09:52 h.El Celta tendrá esta temporada 2024/2025 menos de 300 abonados nuevos -con asiento, sin contar a los nuevos Carnés Celtistas-. Los afortunados son los primeros de la lista de espera, mucho más larga, que se habilitó hace un año, cuando por primera vez, no había sitio para todos en Balaídos. Una de esas personas afortunadas es Cristina Lijó, joven celtista de 25 años de la Peña Alvelo de Ribeira y residente en A Coruña.
La aficionada reconoce que fue «una sorpresa» para ella saber que podría ser abonada este curso, pues con el tiempo que había pasado, ya ni contaba con que aquella inscripción de hace un año siguiera vigente y se conformaba con el nuevo Carné Celtista, que ya había gestionado y recibido antes de que le comunicaran que se podía dar de alta como abonada con derecho a asiento. «La espera mereció la pena», señala.
Para ella, hija del directivo de la Peña Alvelo Antonio Lijó, el celtismo es «un nexo de unión» con su progenitor y «algo que con los años va cogiendo más peso» en su vida. «Justo por eso me quise hacer abonada el año pasado, pero no había sitio», cuenta la hoy nueva flamante portadora de un carné de Río Bajo. «Me hace mucha ilusión tener mi carné y todo», añade.
El primer partido que recuerda es del año 2011, cuando acudió con su padre y una amiga. «También me acuerdo del segundo, porque fue el del ascenso contra el Córdoba», indica evocando el recordado 0-0 de junio del 2012. En los últimos años, también ha sido habitual en bastantes partidos, viajando con el bus de la peña, pero ahora sí que ya no se perderá ninguno. «El Celta es la mejor herencia que tengo de mi padre», afirma orgullosa.