Alejandro Menéndez analiza la llegada al Celta del central, oficializada ayer; el defensa madrileño firma por una temporada más otra opcional
29 ago 2024 . Actualizado a las 05:00 h.El acuerdo con el Athletic Club para la cesión de Unai Núñez dio luz verde a la operación de Marcos Alonso, que ya había llegado a Vigo el martes y que se convierte en el tercer fichaje celeste de este verano. A sus 33 años, el Celta será solo el tercer equipo de la Liga en el que milite un futbolista que ha desarrollado la mayor parte de su trayectoria en el extranjero, en Italia y, sobre todo, en Inglaterra.
En realidad, el fútbol profesional español lo tocó muy poco con el Real Madrid —un único partido en Primera— y lo retomó trece años más tarde, con su fichaje por el Barcelona. Ahora le espera un escenario muy distinto y nuevo para él, que disputó competiciones europeas en las últimas siete temporadas de manera consecutiva. «Siendo juvenil, teníamos en el Castilla la necesidad de un lateral y se le veía una gran proyección. A pesar de su juventud, nos dio muchas cosas y se hizo importante en seis meses», recuerda el excéltico Alejandro Menéndez, su entrenador en aquellos inicios que destaca de él el «guante» que tiene en la pierna izquierda.
Aunque el asturiano contaba con él para el año siguiente, su elección fue un cambio de aires. «Son una familia muy futbolera —su abuelo y su padre, que compartían nombre con él, también fueron profesionales— y su idea era crecer. Adelantaron las etapas», recuerda. Pero en el tiempo que coincidieron pudo comprobar que «es un chico que vive el fútbol, que le apasiona, independientemente de que sea profesional de esto», algo que no ha cambiado con el paso del tiempo y que cree que va a ser fundamental para él en esta nueva etapa que inicia, siendo ya veterano.
Menéndez está convencido de que Alonso será un gran fichaje para el Celta. «Va a entrenar y a jugar como si fuera uno de 20. Su experiencia va a ser muy buena para el vestuario. Puede aportar muchas cosas a ese nivel y, por supuesto, en el campo», apunta. En lo futbolístico, pone el foco en su polivalencia: «En el sistema de Claudio (Giráldez), con tres centrales, puede jugar tanto de central izquierdo como de lateral. Es un jugador muy completo para el Celta».
«Llega al sitio idóneo»
El que fue su entrenador ve en Marcos Alonso a un futbolista «vocacional», de ahí que no crea que vaya a ser ningún problema encontrar la motivación en un club con aspiraciones distintas a lo que ha acostumbrado a lo largo de su trayectoria. «Es de esos que enseguida buscan la pelota, que nunca tienen prisa por marcharse en los entrenamientos. Lo haría gratis», cuenta. Y cree incluso que es un escenario más sencillo para los últimos años de una carrera. «Llega al sitio idóneo. Porque en equipos como Madrid, Barcelona o Atlético es difícil jubilarse. Dejas de jugar y de ser importante cuando siempre lo fuiste y es un sufrimiento. Y ahí va a seguir siendo importante», vaticina.
Sobre las reticencias por su edad o por el hecho de que el año pasado participara poco, subraya que no ha tenido muchas lesiones, que en el Chelsea sí que jugó «muchísimo» y que su manera de entender el fútbol, insiste, le va a ayudar. «Está muy lejos de ser ese jugador castigado y sin ilusión al final de su carrera que va a lo suyo. Es muy pasional y suma muchos valores que me hacen verlo como un gran fichaje», recalca. No pasa por alto su manera de ser: «Es un chico que se hace querer, fácil de manejar desde el punto de vista del entrenador». Está convencido de que se ganará al celtismo enseguida.
Reencuentro con Aspas
Alonso ha disputado nueve partidos con la selección española y en sus primeras convocatorias, en las temporadas 2017/2018 y 2018/2019, coincidió con Iago Aspas, con el que ahora se reencontrará. Sus tres enfrentamientos co el Celta fueron todos con el Barcelona en los últimos dos años. En Balaídos únicamente había jugado hasta ahora una vez: en el partido de la última jornada del 2023 con doblete de Gabri Veiga para la salvación.