Sylla, jugador del Valladolid: «Parece que los años pasan para todos menos para Iago Aspas»
GRADA DE RÍO
El jugador del rival del domingo no tiene claro si el Celta será rival directo
10 sep 2024 . Actualizado a las 05:00 h.Mamadou Sylla Diallo (Senegal, 1994) marcó el gol del ascenso del próximo rival del Celta, el Valladolid, del que también fue máximo realizador el curso pasado, y está llamado a ser un jugador importante en el equipo pucelano en su regreso a Primera. Los de Paulo Pezzolano llegarán a Balaídos con cuatro puntos y tras haber encajado un 7-0 frente al Barcelona, pero con la idea de pasar página y hacer daño a los vigueses. El delantero que es pronto para decir si los dos equipos serán rivales directos, pero por ahora, no lo descarta.
—Llegarán a Balaídos tas un 7-0 frente al Barcelona. ¿Qué lectura hacen de lo que pasó?
—Poca se puede hacer. Es un partido para dejarlo atrás, pasar página, porque fue malo en todos los sentidos. Así que a nivel psicológico, para el equipo, lo mejor es olvidar e intentar preparar lo mejor posible la visita al Celta.
—¿Es de los que prefieren un siguiente partido cuanto antes tras un palo así o mejor tener tiempo para corregir errores?
—Se puede enfocar de las dos maneras y nos toca esta segunda de pararnos en lo que hicimos mal. Pero es verdad que después de un resultado tan contundente, como jugador quieres que llegue el siguiente partido para reivindicarte, así que lo vamos a coger con muchas ganas. Todo el mundo sabe que puedes perder, pero no de esa manera.
—¿Cómo valora el inicio de su equipo, con cuatro puntos?
—Teniendo en cuenta que hemos jugado con los que posiblemente son los dos más grandes de la liga y con dos de nuestros rivales directos, ni tan mal. Quizás contra el Leganés en casa pudimos hacer algo más, pero son los puntos que tenemos y toca seguir.
—Son dos menos que el Celta pese al gran inicio. ¿Qué impresión le ha dado hasta ahora el equipo vigués?
—Les vi tres partidos: Valencia, Villarreal y Osasuna. Veo un equipo dinámico, que juega muy bien y que merecía algún punto más. A nivel de juego, está mostrando un gran nivel. En Villarreal, aunque pierde, marca tres goles, y eso dice mucho de un equipo, de su potencial ofensivo. Sabemos lo que nos toca.
—¿Impone este Celta como local al haber logrado en casa sus dos victorias?
—Sí, pero creo que a todos los rivales en su campo les da un plus. En el caso del Celta, la manera de jugar no cambia mucho: es tener el balón, atacar, mucha gente por dentro que se mueve por todos los lados del campo... Es difícil controlarlos, pero tenemos tiempo para preparar bien el partido, ver cómo hacerles daño y contrarrestar sus virtudes.
—Hablaba antes de rivales directos. ¿Considera al Celta como tal a día de hoy?
—En los últimos años, ha estado ahí, es lo que dicen las estadísticas, pero creo que aún es pronto para saber si va a estar abajo o si va a ser un rival que esté tranquilamente en el medio dela tabla. Esto es largo y las cosas cambian mucho.
—Se ha medido tres veces al equipo vigués sin mucha suerte. ¿Tiene algún recuerdo concreto de estos partidos?
—Me acuerdo de que los tres fueron derrotas, así que cuando pasan esas cosas, uno prefiere olvidarlo. Pero me dan más ganas de resarcirme, y más en una temporada en la que llego, por así decirlo, más como actor principal, porque solo con el Rayo había sido titular contra el Celta. Cada año te haces mejor jugador y el objetivo es poder estar mejor que esas otras veces.
—Se reencuentra con un viejo conocido suyo como Mingueza.
—Sí. Él es cuatro o cinco años más pequeño, pero coincidimos en la cantera del Barcelona y los dos vivíamos en la parte del Vallès Oriental, así que venía una miniván a buscarnos a los dos y a otros compañeros. Siempre que nos vemos, nos saludamos, y cuando vi la lista de la selección, me alegré mucho por él. La convocatoria refleja el inicio de temporada impresionante que está haciendo, con unos números increíbles de goles y asistencias siendo lateral. Cuando uno hace las cosas bien, tiene recompensa.
—¿Qué otros futbolistas del Celta destaca?
—Parece que pasan los años para todos menos para Iago Aspas. Cada temporada te marca sus goles y sigue marcando las diferencias. Le da muchísimo al equipo y es de los jugadores que más me llaman la atención.
—En lo personal, ya había jugado en Primera, pero sin demasiada continuidad. ¿Espera que sea el año de su consolidación?
—Sí, estoy con la máxima ilusión y ganas de que sea así y creo que estoy en el lugar correcto para conseguirlo. Estoy ante una buena oportunidad, en un club donde confían en mí, con un míster que ya ha trabajado conmigo y me conoce. Espero que todo eso lo haga más fácil.
«Desde que empecé en mi primer club, soñaba con dar una vida mejor a mi familia»
El delantero del Valladolid lleva más de veinte años en España. Llegó siendo un niño desde su Senegal natal y desde muy pequeño vio el fútbol como una manera de ayudar a su familia. Quería contribuir a que tuvieran una vida mejor y, a día de hoy, está orgulloso de haberlo conseguido.
—Nació en Senegal, pero ya lleva más tiempo en España.
—Sí. Vinimos mi madre, mis hermanos y yo cuando yo tenía diez años y mi padre ya estaba aquí. Empecé a jugar en el equipo del pueblo donde vivía y luego ya me fichó el Barcelona, donde estuve cuatro temporadas. Después me fui al Mataró, al Espanyol, cedido cuatro años en Bélgica y, cuando volví, Girona, Alavés, media temporada en el Rayo y desde el año pasado, Valladolid. Ese es un poco mi recorrido.
—¿Se imaginaba su familia que llegaría a hacer del fútbol su profesión?
—Es complicado de imaginar, pero están contentos y orgulloso de que haya sido así. Depende mucho de la suerte, porque muchos lo intentan y no llegan, así que me siento un privilegiado por estar donde estoy. Y les doy mucho las gracias a mis padres, porque es gracias a ellos y a apoyarme en momentos difíciles. Cuando me apuntaron a mi primer club, mi objetivo era ya ayudarles a tener algún día una vida mejor. Lo estoy consiguiendo y quiero que sea aún mejor.
—¿Ha vivido episodios de racismo en el fútbol español?
—Llevo aquí 21 o 22 años y, por suerte, nunca me ha tocado vivir nada de eso, ni dentro del campo, ni fuera de él. Nos hemos integrado muy bien, yo tengo amigos españoles, africanos... Se habla mucho de eso por lo que pasó en Mestalla, y creo que siempre va a haber unas cuantas personas que sean así, pero no comparto que se tache a un país entero de racista. No es lo que yo he vivido, no lo veo así.